El aumento del boleto significó una transferencia de usuarios a empresarios de $6.000.000 mensuales. Al menos así lo revela el informe de una organización que reclama por el menos evidente “tarifazo” en el transporte público. (Gonzalo Teruel)
Saeta, la Sociedad Anónima de Transporte Automotor, recibe subsidios del Estado Nacional y Provincial que se complementan a la recaudación proveniente del cobro de boletos a los pasajeros. Pero, según acusa el informe de la organización Patria Grande, sin considerar las millonarias subvenciones “en los últimos meses, el gobierno a través de la Autoridad Metropolitana de Transporte, aprobó un aumento del 46% en la tarifa (de $3,25 a $4,75) alcanzando un acumulado de prácticamente el 100% (desde $2,50) en los últimos 2 años”. Todo ello sin haber mejorado las condiciones del servicio.
A través de 3 viejos decretos nacionales (de los años 2002, 2003 y 2007) el gobierno federal subsidia el transporte urbano en el país. Una de esas subvenciones, el Sistema de Transporte Automotor, se nutre del 18% del valor de venta final del Gas Oil; un segundo subsidio, el llamado Precio Diferencial de Gas Oil, baja los costos de combustibles a partir de un acuerdo entre las petroleras, las empresas prestadoras del servicio y el Estado que congela los precios del combustible por debajo del valor de mercado y aporta la diferencia; y las Compensaciones Complementarias Provinciales que intentan equiparar las ayudas oficiales en todos los centros urbanos del país.
Entre enero y mayo y por esos conceptos (Sistema de Transporte Automotor, Precio Diferencial de Gas Oil y Compensaciones Complementarias Provinciales) las empresas que integran Saeta recibieron $37.359.578, $67.212.810 y $159.876.497 de las autoridades federales. La administración provincial aporta, de acuerdo al Presupuesto 2016, otros $510.000 al año. “Es llamativo en este sentido, la prioridad que le asigna el gobierno provincial a esta actividad teniendo en cuenta las erogaciones del Estado Nacional. De esta manera según el Presupuesto, el gobierno destina fondos 23 veces más a Saeta que a la construcción de viviendas y a la promoción habitacional, 26 veces más que a promover la industria, 6 veces lo que destina a la promoción de empleo y capacitación laboral, y más de 3 veces lo que destina tanto a cultura como al deporte” advierte el documento de Patria Grande.
Pingüe negocio
“Tomando marzo como referencia, el mes previo al tarifazo, tenemos que este grupo de empresas recibió $7.476.024 del Sistema de Transporte Automotor, $31.460.445 de Compensaciones Complementarias Provinciales, y $13.960.560 de Gas Oil a Precio Diferencial (1.425 metros³ de combustible a un precio de $4,50, haciéndose cargo de la diferencia del precio de mercado de $14,11). Sólo durante el mes de marzo, recibieron del Estado Nacional un total de $52.897.029” aseguró Julio Ibarra, economista de la organización.
Y agregó que “además, el aporte provincial mensual es de $42.500.000 por lo que sin contar su recaudación Saeta recibió durante marzo más de $95.000.000 siendo este un monto promedio mensual de los ingresos que reciben estas empresas”.
El detalle de la recaudación presentado en el informe a partir de declaraciones púbicas del presidente de Saeta, Claudio Mastandrea, da cuenta de más 17.000.000 de pasajes vendidos mensuales que, siempre tomando como referencia marzo, a un precio de $3,25 da un total de por lo menos $55.250.000. “Suponiendo que el Pase Libre para estudiantes y jubilados, tenga un costo de $40.000.000 como señaló el mismo funcionario, entonces los ingresos netos mensuales por recaudación de la empresa estarían alcanzando los $15.250.000 por mes” puntualiza. Y concluye que solo en marzo Saeta y las empresas corredoras tuvieron ingresos superiores a los $110.000.000.
Sin embargo y con la sola justificación del incremento de los salarios del personal, que representa algo más del 56% de los costos globales de las empresas, Saeta concretó un importante incremento tarifario. “El tarifazo llegó al servicio de transporte público y el precio del boleto pasó de $3,25 a $4,75 en horas pico y $4,30 en horas valle (un promedio de $4,525) en el mes de junio, en un aumento que se dio en etapas: primero en abril y luego en julio” recuerda el documento de Patria Grande y denuncia que “tal incremento tarifario significó una transferencia de ingresos de los bolsillos de los usuarios al de los empresarios de aproximadamente $21.675.000”.
El cálculo proviene de calcular los 17.000.000 de pasajes vendidos, al nuevo precio promedio de $4,525 restándole al mismo el Pase Libre con un aumento equivalente al aumento de las tarifas.
“El presidente Mauricio Macri anunció un incremento del 37% de los subsidios a todas las empresas de transporte del país, lo que significó otra transferencia de ingresos del bolsillo de las mayorías al de los más ricos de $14.406.493 sólo contabilizando las partidas Sistema de Transporte Automotor y de Compensaciones Complementarias Provinciales” añade el informe y protesta porque “mientras un puñado de empresas obtienen ganancias extraordinarias, son cientos de miles los usuarios que ven ajustados sus bolsillos cuando los aumentos de tarifas se imponen como una ‘necesidad’ de la economía”.
Frente a semejante realidad, Patria Grande reclama “revisar todos los tarifazos” y avanzar en la creación de mecanismos que permitan al conjunto de la población ser partícipe de las decisiones políticas en relación al servicio de transporte urbano tales como la planificación de los recorridos, la frecuencia, y los movimientos de tarifas, entre otros.