En el pueblo festejaron como si se tratara de un viaje intergaláctico.

Es interesante el contraste que atraviesa el país. Un día después de que el gobierno nacional pusiera en órbita un satélite y que un científico argentino probara que se puede viajar al futuro, en Morillo lograron hacer el primer pozo de agua.

Hace 70 años que lo esperaban. El intendente Atta Gerala no ayudó nada, en su casi dos décadas al frente del municipio.

Ayudaron a esta proeza el supervisor Rafael Gutiérrez, el Geólogo Martín Castellaro, los perforistas Guillermo debock y Federico flores, los loderos (encargados del lodo de perforación) Miranda Emanuel. Guaymas Néstor. También estuvo José Núñez a cargo del estudio del movimiento del suelo y los mecánicos José Zenteno y Santiago Tilca.

Puede parecer poco para los lectores de Salta Capital. Pero a los habitantes de Morillo significará un cambio en sus vidas.