La mujer se desempeña en la secretaría de Niñez y Familia. Para evitar que su yerno conozca a la niña evitaron asentarla en el registro civil por más de un mes.

 

En tiempos donde se prima el derecho de los niños, niñas y adolescentes, una familia decidió tomar de rehén a una bebé, llevando adelante todo tipo de estrategias con el único objetivo de no permitir que el padre, ni la familia paterna conozcan a la niña.

Facundo Patrese se separó de la actual madre de su hija, cuando ella cursaba el quinto mes de embarazo. Sin embargo, nunca quiso desentenderse de sus responsabilidades como padre. Intención que fue sistemáticamente frustrada por su ex pareja, y, sobre todo, por la familia materna.

Según se conoció, la ideóloga de las maniobras es la abuela materna, quien, paradójicamente es funcionaria de la Secretaria de la Niñez. En efecto, Elizabeth Rosario Maldonado Claure trabaja en el Gobierno de la provincia de Salta, precisamente en esa cartera.

“Resulta aún más alarmante el comportamiento de esta señora, ya que se supone que en su labor debe tener como eje y responsabilidad la protección del interés superior del niño o de la niña, entendiendo como fundamental la vinculación de la menor no solo con su padre sino con toda la familia paterna, ponga constantes obstáculos para llevar a cabo tal vinculación”, manifestó Natalia Carolina Otero, abogada del padre afectado.

El 26 de mayo, día en que nació la menor, por decisión de su abuela materna, al padre no le permitieron conocer a su propia hija. Situación que tristemente se mantiene hasta el día de hoy.

Las maniobras para desvincularla del afecto de su papá y la familia paterna, incluso, han llegado al extremo de no anotarla en el Registro Civil. Situación que fue revertida, tras casi un mes y medio, interponiendo una intimación judicial, accionada por los abogados de Patrese.

Actualmente, hay una denuncia por impedimento de contacto y una de supresión del estado civil desfavoreciendo totalmente el vínculo con el padre y su familia.

“Convocamos a 5 mediaciones, pero la madre nunca se presento. En las últimas solo se presentaron los padres de ella con una actitud hostil y poco colaborativa al objetivo primordial, que es el de resguardar el derecho que tiene la niña de conocer y generar un vínculo con su padre y la familia paterna”, concluyó Otero.