Si algo le faltaba al escándalo del cura Rosa y los abusos sexuales, eso era el pedido de prisión preventiva a la ex monja María Alicia Pacheco, quien era parte de la congregación religiosa y está acusada de abusar sexualmente de una adolescente.

La noticia ya recorre las redacciones de medios nacionales y da cuenta de que el Ministerio Fiscal de Salta pidió la prisión preventiva de la ex monja María Alicia Pacheco. La misma está “acusada por abuso sexual cometido contra una adolescente que estaba a su cargo en la congregación Discípulos de Jesús de San Juan Bautista, el instituto creado en 1996 por el cura Agustín Rosa, detenido por abuso sexual desde diciembre pasado”, precisa Página 12. La ex religiosa Pacheco, que era conocida como monja bajo el nombre de “hermana Micaela”, fue detenida en su casa de General Güemes la semana pasada, cuando resultó imputada por abuso sexual gravemente ultrajante agravado.

La investigación judicial comenzó tras la denuncia de María Gracia Ramia, una mujer que en su adolescencia concurría al instituto fundado por Rosa. Ante la Justicia, Ramia contó que, cuando ella tenía 13 años y concurría al instituto la entonces monja comenzó a hacerla objeto de un acoso sistemático, y que al principio, como ella rehuía, llegó a ir a buscarla a su casa. “Como yo había dejado de ir por unos días a la iglesia, me dijo que no aguantaba no verme, que me extrañaba”, detalló la mujer a la prensa salteña. Ramia también recordó que Pacheco, esa vez que fue a su casa, le pidió ver su habitación. Una vez allí, “me dice que su sueño era tener relaciones en mi cuarto, me tiró a la cama y volvió a abusar de mí”.

Ramia contó a la superiora Daniela Mónica Olmos (conocida como “María Luz”), a otra monja y a tres curas el acoso que sufría por parte de Pacheco, tras lo cual la monja la retó. “Me dijo que sus superiores se habían enterado que estuvo en mi casa y que le dieron a elegir entre irse o no tener más contacto conmigo”, contó Ramia.

La todavía monja, añadió Ramia, le contó que evaluaba dejar Salta para radicarse en Entre Ríos y le propuso que la acompañara. “Me dice que si decidía irse a Entre Ríos se animaría a hablar con mi madre para que me fuera con ella y esto me asustó muchísimo”, dijo. Pero luego Pacheco fue trasladada, sucesivamente, a Cachi y al sur del país, donde el cura Rosa había abierto otro centro de clausura. Ramia declaró que Pacheco abusó de ella entre 2004 y 2005.