En San Luis, el obispo de la diócesis, Pedro Daniel Martínez, vedó por decreto la promoción y formación de “monaguillas” y dispuso que los varones sean los únicos habilitados a estar en el altar.

El obispo de San Luis, monseñor Pedro Daniel Martínez, prohibió la promoción y formación de “monaguillas” en todas las parroquias e iglesias de la diócesis y dispuso por decreto del Obispado mantener la costumbre litúrgica de aceptar solo monaguillos varones para el servicio del altar.

Esta decisión del obispo Martínez se conoció este viernes y generó malestar en muchas mujeres que ya estaban prestando esos servicios en los altares.

Una de ellas declaró a Télam, pidiendo reserva de su identidad, que en la Iglesia Catedral varias veces pretendió leer alguna lectura en oficios religiosos fúnebres de familiares, y el párroco del lugar, padre Daniel Pérez, le respondió que las mujeres no podían estar en el altar realizando esa tarea.

El decreto del Obispado exhortó a los sacerdotes, tanto seculares como religiosos, a mantener la costumbre litúrgica que los monaguillos deben ser únicamente varones.