El deplorable estado de la calzada previo a la construcción de los carriles es uno de los señalamientos más recurrentes. Sólo para esa arteria se presupuestaron $3.178.621,72.
La obra a cargo de la empresa Oscar Zoricich en calle Alvarado suma rechazos de todo tipo y los resultados distan mucho de los obtenidos en Av. Belgrano. Bloques de cemento destrozados y fuera de lugar, desniveles y pozos en la calzada, configuran el triste panorama de un proyecto que -por ahora- valió 3.17 millones de pesos.
Tal es así que concejales y funcionarios de la Secretaría de Movilidad realizaron hoy una reunión virtual para modificar la ordenanza referente a la creación de dichas ciclovías. El objetivo, según planteó su impulsora Rosa Herrera (PPS), es «adecuar el cuadrante del área centro, específicamente en las calles que contienen ciclovías, a esta nueva infraestructura que se está concretando en esa zona».
Las quejas no sólo vinieron desde el concejo deliberante, sino también desde las agrupaciones de ciclistas, quienes manifestaron su preocupación por el estado desastroso de la calzada previo a la construcción de las bicisendas. No obstante los señalamientos, desde el municipio -y en particular desde la secretaría de Desarrollo Urbano a cargo de María Eugenia Angulo-, decidieron seguir con la cuestionada obra.
La arteria en cuestión, además de ser más angosta que la mayoría de las calles céntricas, exhibe marcados desniveles por las múltiples capas de cemento acumuladas; algo que representa un riesgo para los ciclistas y que debió haber sido corregido antes de comenzar con la delimitación de carriles. Desde el municipio comandado por Bettina Romero parecen decididos a continuar con el proyecto pese a los «errores infantiles», tal como señalara el edil Santiago Alurralde.