500 gendarmes que se encontraban cumpliendo funciones en la frontera con Bolivia fueron trasladados a Buenos Aires en vista a las elecciones futuras, pero a no preocuparse porque vuelven en 5 meses, ¿cuánta merluza puede pasar en ese tiempo?

La frontera es una joda, porque mientras al jefe de la Brigada oranense lo encuentran en un cabarulo al intendente de Salvador Mazza no le va mucho mejor, pero a pesar de eso quiere seguir cumpliendo sus funciones.

Ahora se informa que 500 efectivos de gendarmería fueron puestos a disposición de otra jurisdicción con el fin de colaborar para las próximas elecciones. El viaje, claro está, no es gratuito puesto que todos cobrarán los viáticos correspondientes a los próximos 5 meses que durará este pequeño servicio, mientras en la frontera se las tendrán que arreglar como sea para paliar la falta de efectivos.

Se viene una segunda mitad del año dura, bastante dura dirán muchos.