Luciano Camaño, presidente del Centro de Estudiantes de la Escuela Normal, habla sobre la marcha del jueves 10 en la que participaron más de cien jóvenes secundarios movilizados en contra de las restricciones hacia el boleto estudiantil y la suba del boleto. La Coordinadora denuncia aprietes policiales. F.A.

Fue una semana de diferentes movilizaciones contra la suba del precio del boleto de SAETA y las restricciones al pase estudiantil impuesto por la empresa, vigente desde el 25 de agosto. La marcha más numerosa y trascendente de los últimos días fue la que interrumpió la audiencia pública no vinculante que se desarrollaba en el microestadio Delmi, el 8 de septiembre. Allí, cientos de militantes, estudiantes y ciudadanos irrumpieron a pesar del vallado policial e hicieron saber su descontento por la propuesta de aumento.

El jueves 10 se realizó otra movilización de la que participaron más de cien jóvenes estudiantes secundarios. Se trasladaron desde la Escuela Normal hasta la Legislatura y luego a la plaza 9 de Julio. Allí también hicieron oír su protesta.  “Durante el transcurso se adherían estudiantes de otros colegios a la marcha”, recuerda Luciano Camaño, presidente del Centro de Estudiantes de la Normal.

“Nosotros organizamos la marcha mediante la asamblea de delegados y yo me tomé el laburo de ir curso por curso para concientizar a los chicos de que es un avasallamiento a los derechos de todos los estudiantes. Queremos con esta marcha ser un foco que genere más movilizaciones en contra de esta medida”, explica Camaño.

Luciano agrega que “hubo mucha mayor participación de chicos de entre 14 y 16 años en esta marcha”. “Quedamos contentos por la convocatoria y esperamos que se escuche nuestra voz así no es una cuestión de que si gana más un empresariado que no piensa en la todos los estudiantes y en las múltiples realidades”, completa.

Las autoridades del colegio no estuvieron en la decisión de la medida de fuerza tomada por los chicos y Luciano reconoce que el derecho a manifestarse de los estudiantes ha sido respetado.

Respecto a nuevas medidas de fuerza, Luciano cuenta que esperan ver cómo se desarrollan los acontecimientos después de los feriados del Milagro. “Si llegase a ser necesario hacer otra movilización entonces la haremos. Habrá que consensuar con otros centros de estudiantes y marchar todos juntos en esta causa que la única bandera que lleva es la de la defensa de los derechos estudiantiles”, finalizó.

Turbias maniobras

El viernes 10, la Coordinadora contra el Aumento del boleto y las restricciones, conformada por estudiantes independientes; Patria Grande; CECE; IEM; CEPA; UJS-PO; MST; PTS; CCC; y Tribuna Libertaria, emitió un comunicado en el que denunciaron aprietes policiales.

“En los últimos días, diferentes compañeros fueron amenazados, perseguidos y hostigados por miembros de la policía uniformados y en carácter de ‘civiles’. Además de la infiltración por parte de la policía en las asambleas, reuniones y todo tipo de actividades públicas convocadas por la coordinadora, el lunes pasado, un grupo de uniformados y civiles quisieron detener a tres compañeros sin motivos en el parque San Martín. A esto debemos sumar las persecuciones sobre un compañero, estudiante del secundario que desde el martes pasado viene siendo atacado en la vía pública por personas que nunca se identificaron pero que tenían información certera sobre su familia y lugar de residencia, datos que utilizaron para realizar amenazas”, denuncia el texto difundido en las últimas horas.

“Desde la Coordinadora queremos que estas amenazas tomen el mayor estado público ya que no se desarrollan de manera aislada, estos compañeros forman parte de una organización estudiantil que en el último periodo ha salido a denunciar los intentos de SAETA en alianza con el gobierno de Urtubey de imponer un nuevo ajuste que afecta directamente al estudiantado y a las y los trabajadores de la provincia de Salta, producto del anuncio del aumento del boleto y de la aplicación de restricciones en el pase estudiantil”, sigue el texto.

El comunicado continúa asegurando: “Es en éste marco en el que entendemos que todo lo ocurrido hasta aquí cobra una relevancia vital. Estos son los métodos por los cuales el Gobierno pretende imponer un ajuste contra la población de características absolutamente anti-populares. Por todo esto, repudiamos y exigimos de manera inmediata que cesen todas las amenazas contra las y los estudiantes que nos organizamos”.

La coordinadora hace responsables a las fuerzas de seguridad por los ataques recibidos. “Al Gobernador de la Provincia de Salta, Juan Manuel Urtubey, hacemos responsable de la integridad física y la seguridad de cada miembro de esta coordinadora estudiantil”, expresa.

El comunicado finaliza anticipando que se realizará la denuncia pertinente en la Fiscalía de Delitos Policiales incluido el pedido de las cámaras de seguridad en la zona del Parque San Martín y calle Zuviría y Belgrano “para determinar quiénes son los responsables del hostigamiento”.

Un aumento que se viene

El jueves, el portal web La Gaceta Salta reveló que “mediante un amparo judicial intentarán frenar la suba y restricción del pase libre en el boleto estudiantil” y señaló al polémico abogado Santiago Pedroza como impulsor de la acción judicial.

En efecto, Pedroza se presentó ante el juez de la Cámara de Apelaciones Civiles, Marcelo Domínguez por considerar que “el pedido de SAETA, de actualizar nuevamente la tarifa es ilógico, porque el 80% del costo operativo de la empresa es subsidiado por el gobierno”. “Si SAETA justifica el aumento del boleto, para renovar su flota de colectivos debería exigirle más inversión a los empresarios, y no pretender que el usuario las pague con su bolsillo”, acusó el abogado y consideró “ilógico” el fundamento ofrecido por el titular de Saeta, Claudio Mastrandrea, que en la Legislatura aseguró que la empresa tiene un déficit mensual de $3 millones. El juez Marcelo Domínguez tendrá a su cargo resolver el amparo.

Así finalizó una semana repleta de irregularidades, como la ocurrida el lunes, cuando distintos usuarios denunciaron que las máquinas de los colectivos ya estaban cobrando el aumento, cuando el mismo no fue autorizado todavía.  Radio Vos publicó en su cuenta de Facebook la fotografía de un boleto emitido ese día a las 8.28 por el interno 743 del corredor 7B, en el que se comprobaba que la máquina había cobrado $3,50, en lugar de los $3,25 que todavía supuestamente se mantienen. Luego, en FM Capital, diferentes usuarios de la misma línea aseguraron pagar $3,50 en los últimos días, a pesar de que la suba no fue autorizada.

A las pocas horas, SAETA publicó un comunicado asegurando que todo había sido un error de sistema.

foto: Punkie Fernandez