Tras recuperarse de una grave decaída en su estado de salud, Jean-Michel Bouvier -padre de una de las francesas violadas y asesinadas en Salta- recibió una carta de quien las vio antes que viajaran a la provincia.
Jean-Michel Bouvier compartió una carta que recibió de una de las amigas de Cassandre y Houria, de origen chileno, que las vio por última vez en la embajada de Francia en Buenos Aires. Fue en julio de 2011, antes de que llegaran a Salta donde días después serían asesinadas.
Jean-Michel Bouvier escribió: “Este sábado vi a la amiga de Cassandre, con quien había salido de Londres a Buenos Aires en 2011 y con quien debería haber regresado a casa a fines de julio. Revisitar a las amigas de Cassandra es, más allá de compartir el dolor de su desaparición, una alegría porque es una oportunidad para evocar sus cualidades, sus compromisos y la ilusión de resucitarla”.
Como cuenta en su carta, en memoria de Cassandre y mujeres trabajan en un proyecto artístico para luchar contra la violencia extrema a cuerpos-mujeres víctimas de Chile, Argentina y Bolivia; casos que han quedado en la impunidad “responsabilizando a los estados y justicia patriarcales que por omisión o inacción encubren, promueven y son cómplices de estos crímenes”, dice Daniela, la amiga chilena.
En su carta, además, describe que en junio de este año se reunieron con militantes de organizaciones feministas de Salta. En esa oportunidad se interiorizaron sobre la situación de una de las provincias con mayores índices de femicidios y violencia hacia niñas y mujeres.