El actor quedó sin un show que tenía programado en nuestra ciudad por haber puesto en duda el trabajo de Abuelas de Plaza de Mayo por recuperar la identidad de los nietos secuestrados por la dictadura cívico-militar.

«Debido a las declaraciones públicas de Alfredo Casero, que reivindican la última dictadura militar en nuestro país, El Teatrino decide cancelar la función programada para el viernes 24 de agosto», anunciaron desde el espacio cultural.

En la entrevista con Alejandro Fantino, el actor puso en duda la identidad de Marcos, el nieto 128 encontrado por Abuelas, que fue secuestrado en 1976 en Tucumán, cuando tenía cinco meses. “Siguieron mintiendo. ¿Viste el último nieto que encontró la (Estela) Carlotto, un pibe de 40 años?”, señaló.

“Yo quiero saber toda la verdad. ¿Estás seguro que el último señor es un nieto recuperado? Quiero estar seguro de todos los nietos. No hablan como si estuvieran a cargo de un organismo de derechos humanos”, insistió Casero.

«A todos los que hayan comprado la entrada se les devolverá el dinero en los puntos de venta en que fueron adquiridas. Las compras realizadas con tarjeta de crédito se cancelaran automáticamente», avisaron desde El Teatrino para confirmar la primera cancelación de Disertación sobre lo bello, lo bueno y el bien —como el ex Cha Cha Cha tituló a su nueva obra tras los dichos de Casero en contra de los 40 años de lucha de Abuelas.

El nieto 128

Hijo de una activa militante del PRT. Rosario del Carmen fue secuestrada a principios de 1976, mientras estaba embarazada, en un operativo realizado por las fuerzas de seguridad en la zona del viejo cargadero de caña de la localidad de San José. La mantuvieron cautiva varias semanas hasta que fue liberada. Su tercer hijo, Marcos Eduardo Ramos, nació el 9 de junio de 1976.

En noviembre de 1976, fuerzas de seguridad realizaron operativos ilegales en la capital tucumana y secuestraron a Rosario del Carmen, que partió con destino desconocido en un Ford Falcon blanco. En ese momento, Camilo se encontraba al cuidado de su padre, pero Ismael y Marcos, que vivían con su madre, fueron llevados a una casa quinta ubicada en Tafí Viejo. Esa fue la última vez que Ismael vio a su hermano menor. Luego de permanecer una semana allí, Ismael fue trasladado a otro domicilio en Tucumán, del que escapó muchas veces, hasta que en una ocasión logró ubicar a su tío paterno, quien dio aviso sobre su paradero al padre. Así lograron recuperarlo. Desde entonces sabe que tiene un hermano menor que fue secuestrado. Rosario continúa desaparecida.