La audiencia pública por el dengue en Orán fracasó cuando el intendente Marcelo Lara Gros huyó del recinto para evitar los cuestionamientos. Desde el 2010 que declara la emergencia ambiental sin rendir cuentas sobre uso de los recursos.
Todos los testigos calificaron a los sucesos como un abierto papelón: literalmente Lara Gros huyó del Concejo. Los cuestionamientos, como se puede adivinar, eran muchos y ante ello el iracundo jefe comunal argumentó que «era una falta de respeto” y que todo estaba politizado y abandono el lugar.
Según informó Radio Cadena Noa, las autoridades sanitarias indican que el 80% de la prevención de la enfermedad es el tratamiento ambiental, esto significa la eliminación de letrinas por instalación de cloacas, instalación de agua potable domiciliaria para evitar el grifo público y la planta de tratamiento de la basura. Cuando Lara Gros fue consultado por la cloacas se retiró del recinto argumentando que era una falta de respeto y que estaba todo politizado.
No era ese el único problema. Tal como informara Cuarto Poder en un informe publicado el sábado pasado; Lara Gros declara la emergencia ambiental desde el año 2010 pero nunca rindió cuentas de cómo uso los recursos para tratar la misma.
Este medio no pudo acceder a los montos que desde 2010 a la fecha se transfirieron al municipio, pero sí a documentación que prueba que el intendente declaró desde ese año un Estado de Emergencia Ambiental que facultaba al intendente a realizar readecuaciones presupuestarias para adquirir bienes y contratar servicios para cumplir el objetivo. La falta de respuesta ante los pedidos de informes originó que durante el año 2014, el Concejo Deliberante aprobara el 22 de mayo y el 23 de octubre de ese año proyectos que exigían al ejecutivo municipal informar sobre qué se hacía con los recursos.
Como nunca Lara Gros respondió a los pedidos, en marzo de 2015 los ediles Patricia Hucena, Eduardo Giménez y César Cisterna lo denunciaron ante la Fiscalía Penal Nº 3 por incumplir “dolosamente y en forma reiterada su obligación dispuesta en el art. 77 inc i y art. 77 inc. ll) de la Carta Orgánica Municipal”.
El carácter electoral del año 2015 sólo empeoró las cosas. En abril de ese año el Concejo Deliberante rechazó la declaración de la emergencia que, sin embargo, ya se había realizado en febrero de ese año: tres meses antes de las elecciones en la que Lara Gros buscaba la re-reelección. Tiempo suficiente para aprovechar el uso discrecional de los recursos de los que nunca rindió cuenta.
Tras meses de brote epidemiológicos que ya se ha cobrado una decena de víctimas fatales, la audiencia pública de ayer parecía ser el primer paso a una conducta más responsable del rector. Los sucesos mostraron que no.
a página oficial del Centro de Cómputos de la UNSa no había publicado nada, mientras que en la primera vuelta se fueron colgado los datos a medida que iban entrando. En este caso se publicaron todos de una sola vez.
¿Dónde se situó el Centro de Cómputos oficial? El órgano, supuestamente imparcial, estuvo apostado en el segundo piso de la facultad de Económicas, adonde se cerraron las puertas con candado impidiendo el ingreso a los miembros de Universidad Futura. Paralelamente, militantes que acompañaban a Fernández Fernández se paseaban con bombos y banderas adentro del edificio vedado para los opositores.
Asimismo, sorprende el resultado lapidario de algunas mesas. En Tartagal una mesa de estudiantes concluyó con un categórico 90 a 3 a favor del clarismo, mientras que en Santa Victoria fue 20 a 0. Se pedirá la impugnación de algunas mesas como éstas, adonde aparentemente habrían votado personas que no estaban empadronadas.