Al cumplirse un mes de la desaparición de Jésica Gutiérrez en la localidad de La Caldera, su familia continúa aferrada a la esperanza de encontrarla con vida. Rebeca, su tía, expresó la angustia que los envuelve pero también su firme convicción de que el caso no quedará en el olvido.
La joven madre de cuatro hijos fue vista por última vez el pasado 11 de septiembre. Desde entonces, los esfuerzos de búsqueda no han cesado, con rastrillajes más profundos realizados por la policía y la comunidad. En una reciente entrevista en el programa «¡Qué Domingo!», emitido por Radio Aries y conducido por Violeta Gil, Rebeca declaró: “La policía sigue buscando, pero nosotros mantenemos la esperanza de que aparezca con vida”.
Los vecinos de La Caldera han sido un apoyo crucial para la familia de Jésica desde el primer día. «Estoy muy agradecida con los vecinos, porque han estado desde el principio, salieron al campo a buscarla», expresó emocionada. La solidaridad de la comunidad ha sido un pilar que sostiene a la familia en estos difíciles momentos.
Jésica, madre de cuatro pequeños, ha dejado un vacío profundo en su hogar. Los niños, actualmente bajo el cuidado de sus abuelos paternos, no han sido informados completamente sobre la situación. «Tratamos de que jueguen y no sientan la ausencia de golpe», comentó Rebeca, visiblemente afectada. Además, mencionó que la madre de Jésica, abatida por el dolor, ha optado por mantenerse al margen de la exposición mediática, mientras que su hermana María es quien lidera la búsqueda activa.
Aunque aún no han surgido pistas claras sobre el paradero de Jésica, la familia mantiene contacto permanente con las autoridades. «Hablamos con la fiscal y nos prometieron que seguirán buscando. No vamos a dejar que el caso de Jésica quede en el olvido», enfatizó Rebeca.
Jésica era conocida por su amor al fútbol y jugaba habitualmente los domingos con sus amigos en La Caldera. Su ausencia ha dejado una marca en la comunidad, que, al igual que la familia, reclama el esclarecimiento de su desaparición. Cada domingo, sus amigos la recuerdan con dolor y esperan que el caso avance, mientras el pueblo salteño sigue exigiendo justicia.