Un hombre intentó conseguir un crédito del banco con un cuchillo, pero no apretando al cajero, sino amenazando con cortarse el pescuezo si no le daban la guita. Una nueva metodología puede surgir de este caso, la extorsión a partir del suicidio, mejor no avivemos a los pungas.
Momentos de tensión se vivieron ayer en un banco de la capital salteña cuando un hombre de 54 años se puso al borde de la locura monetaria cuando se le negó un préstamo luego de comprobar que tenía un bajo puntaje crediticio. Fue entonces que el hombre sacó un cuchillo de entre sus pertenencias y se lo colocó a la altura de la yugular mientras amenazaba con quitarse la vida ahí nomás, si es que no le daban el crédito que necesitaba.
Testigos atónitos del hecho se comunicaron con la policía, cuál habrá sido la sorpresa de los canas al darse con una situación en la que el malhechor debe ser reducido con cautela, cuidando su integridad y no a los golpes como están acostumbrados en casos de asaltos y demás.
Según informa el portal web de la policía “se logró la demora del causante domiciliado en barrio Intersindical y se le secuestro el elemento punzante.”
