El diputado había dicho que el 30% de las mujeres que denuncian violencia de género mienten.
Las críticas vinieron de todos los sectores. No los une el amor, pero sí el espanto ante una expresión troglodita: minimizar la violencia machista, en una provincia donde los femicidios son cotidianos y brutales.
Malvina Gareca no se quedó callada: ¿Suriani tendrá el coraje de decirles a las familias de las víctimas de femicidios, que no hay que alarmarse tanto ante las denuncias que -según él- el 30% son mentiras?, se preguntó. Y acotó: «Es una vergüenza que un legislador minimice una problemática que este año ya se cobró 12 vidas en Salta Y casi arrasa con otras 19. El Diputado que apela a estadísticas inverosímiles para justificar su oposición a toda política que pretenda erradicar la violencia de género, ¿sabrá que en el 43% de los femicidios de este año, existian denuncias previas?»
Claudio del Plá compartió en Twitter la nota de CUARTO PODER, en la que se daba cuenta de la barbárica declaración de Suriani. El legislador del Partido Obrero expresó: «Este provocador merece que un grupo de mujeres le haga entender a patadas que no debe ofenderlas…pero mejor no… porque se ensuciarían sus zapatos con mierda.»
Gustavo Farquharson, titular del Inadi, expresó: «Salta encabeza los índices sobre casos de Violencia de Género en el país y tenemos que aguantar la ignorancia y mentiras irresponsables que refuerzan el machismo cavernario como el del diputado terraplanista antivacuna y antiderecho».
Hay un solo detalle que consuela. Y no es menor: a Suriani le falta poco, poquito, casi nada para dejar de ser diputado.