Comerciantes del casco céntrico reportaron varios casos de aves que ingresan a los negocios y roban mercadería. La banda de las palomas aterroriza tras cada golpe. Piden mano dura.
Al menos cuatro (4) kioscos del microcentro fueron asaltados en las últimas dos (2) semanas en lo que los investigadores de la policía salteña han denominado como la modalidad “robo paloma”.
Por más extraño que parezca las aves colúmbidas que habitan alrededor de plaza 9 de julio han desarrollado una habilidad grupal que escapa al entendimiento de expertos biólogos consultados por El Polichombi. Un grupo de investigadores del COÑICET determinaron tras un arduo estudio realizado sobre las palomas chorras que “esto es cosa de mandinga”.
Según los testimonios de las víctimas, imágenes obtenidas por las cámaras de vigilancia y demás vecinos vigilantes que aportaron su versión, el modus operandi de las palomas sería el siguiente: dos (2) de las aves ingresarían al negocio marcado con anterioridad, y otras dos (2) o tres (3) se quedarían afuera haciendo “de campana” para así asegurar que ante cualquier posible intervención de la policía, la retirada sea instantánea. Ya lo dice el viejo y conocido refrán, pájaro que choreó… voló.
Hasta ahora se han reportado dos denuncias formales en la comisaria 69 por “robo con arma blanca camuflada bajo el ala”, aunque no se ha podido determinar si las mismas serían de verdad o simple mambo alucinatorio de los asaltados.
Además se han registrado varias denuncias en las redes sociales, acompañadas de pedidos por el regreso del incasable luchador contra las palomas, Aroldo Tonini, quien fue más de una vez evocado, “para que vuelva y haga pingo a todos esos pajarracos del orto que lo único que hacen es comer mierda y cagar estatuas”, comentó el monseñor Bernacki en su cuenta de Instagram.