Más sola que activista vegana en Salta.
Después de la irrupción de una horda de veganos en la Rural de Buenos Aires, todos esperaban que en Salta ocurriera algo. Es verdad, esta provincia es más pacífica, pero como en los últimos días tantos salteños habían publicado posteos indignados, emocionados y hasta conmocionados por el Amazonas, había cierta expectativa por lo que pudiera pasar en la cheto fest local.
La protesta llegó, aunque paupérrima: una mujer se metió en la pista, disfrazada de yaguareté, con un cartel de cartulina amarilla y con la leyenda “STOP JINETEADA”. En su abdomen, la mujer se había escrito “Abolición”.
A la chetada esto no les gustó nada. “Coman lo que quieran y déjennos comer a nosotros lo que queramos, ese es el respeto de la libertad”, dijo el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas, Dardo Chiesa.
Al parecer lo aplaudieron.
El problema, en todo caso, es que hay muchas personas que sí quieren seguir comiendo carne, pero no pueden.
