Vecinos de los barrios cercanos (y no tanto) a la carpa «Pujllay» denuncian que el volumen es insoportable. Desde la municipalidad hacen oídos sordos al reclamo.
La reciente habilitación de los eventos masivos al aire libre preocupa a vecinos de varios barrios de la zona sur, principalmente a aquellos que colindan con el predio del club Cachorros. Según denuncian, en ese lugar funciona la carpa «Pujllay» y los ruidos (que perduran hasta altas horas de la noche) son insoportables.
A pesar de las múltiples denuncias policiales radicadas en la comisaría del lugar, para este domingo se espera una concurrencia masiva al predio. Desde el área de inspecciones de la municipalidad dan respuestas ambiguas y poco convincentes.
«El 1 de enero empezaron a las 6 de la tarde. Yo vivo en barrio La Aldea y se escuchaba muy fuerte. Me comuniqué con mi mamá que vive en barrio Intersindical y me dijo que también se escuchaba. Fui hasta su casa y era verdad», relató una vecina de la zona.
En otros barrios como: Los Psicólogos, Los Eucaliptos, 14 de mayo y Miguel Aráoz, los vecinos denunciaron a través de redes sociales que el volumen de la carpa es «intolerable».
Versiones cruzadas:
El Jefe del Programa de Inspecciones Ambientales de la secretaría de Ambiente y Servicios Públicos, Gonzalo Javier Martinez Garcete, fue consultado por los vecinos al respecto y aseguró que, tras una inspección realizada el 1 de enero, se multó a los organizadores. Sin embargo, los dueños de la carpa negaron que haya existido dicha sanción.
«Nos dijeron que hubo una inspección y que los multaron. Pero ahora vimos que ya está anunciado para el próximo domingo. Me comuniqué con el dueño de la carpa y me dijo que ellos tienen el volumen permitido y que no había ninguna multa, que piensan seguir», relató una de las denunciantes.
Finalmente destacaron que, además de haber vecinos con autismo y otras enfermedades, la mayoría de los habitantes de la zona trabaja temprano cada lunes. La carpa, en tanto, funciona cada domingo y se extiende hasta la madrugada.