Concejales criticaron con dureza a la intendencia por la falta de control.
Un hombre en situación de calle murió mientras buscaba sobras de comida en el Vertedero San Javier, un depósito de basura de la capital de Salta. En horas de la mañana, mientras dormía, el sujeto fue aplastado por una de las máquinas. Luego, el cuerpo fue reconocido por familiares del señor que confirmaron que se trataba de Facundo Velas.
La desesperación y el dolor se apoderaron de las personas que buscaban entre la basura al advertir el trágico desenlace. Pero, sobre todo, de los familiares de Velas que llegaron hasta el basural ubicado en la zona sudeste de Salta capital.
Según manifestaron personas que, al parecer, habían estado este domingo por la mañana en el lugar, Facundo Velas estaba durmiendo en el momento que un maquinista lo pasó por arriba sin advertir su presencia. El momento crítico fue reportado al Sistema de Emergencias 911. Al arribar al lugar, los paraMédicos constataron que el hombre ya no tenía signos vitales.
Los más humildes, aquellos a los que el sistema no registra y los que sufren la pobreza extrema son quienes acuden al vertedero para escarbar entre el excremento y poder llevar algo de comida a sus casas o bien objetos que luego puedan comercializar.
Si bien el ingreso es restringido, hay grupos de cooperativas que tienen permitido, indigentes que se las arreglan para meterse y a veces familias enteras que llegan para saciar.
Críticas a Bettina
En la sesión de este miércoles, el concejal José Gauffin se mostró preocupado por las muertes que se registraron en el vertedero San Javier, y pidió a sus pares trabajar en un proyecto de ordenanza que brinde seguridad en el espacio.
Recordó lo sucedido el pasado 4 de marzo en el predio del relleno sanitario donde una persona falleció atropellada por una maquina vial. Lo mismo ocurrió el 9 de octubre, donde un joven de 21 años que se encontraba durmiendo tuvo el mismo desenlace.
Si bien el concejal dijo que la Municipalidad de Salta deslindó responsabilidades en Agrotécnica Fueguina, empresa que administra el relleno sanitario, aclaró que el municipio tiene responsabilidad en ambos hechos.
“La Municipalidad no audita ni controla a sus propios contratistas, tampoco tiene profesionales competentes en el área”, sostuvo Gauffin, quien agregó que “deben preocuparse para que haya condiciones mínimas de seguridad como por ejemplo poner alguien de guardia en el lugar para evitar más accidentes”.