Ayer el presidente Macri recibió en Berlín a los enviados de LA NACION y Clarín para una entrevista. Les reconoció que tomó medidas con alto costo social pero insistió en que va por el camino correcto. Dejavú menemista y algo más.
Durante la entrevista el presidente aseguro que si cuando termine su presidencia no baja la pobreza, habrá fracasado. La entrevista es la siguiente.
-La Argentina y el Mercosur están pidiendo a Europa más flexibilidad para las exportaciones agropecuarias. ¿Qué van a ceder a cambio?
-El planteo claramente es: ellos tienen serias ventajas en todo lo que es el aparato industrial, fabricación de bienes y servicios. Nosotros tenemos ventajas en el sector agrícola. Entonces todo tiene que estar sobre la mesa para buscar balances y equilibrios.
-¿Esto significa para la Argentina más exportaciones agrícolas y más importaciones de productos industriales?
-Ése es un resultado que se verá. Estamos hablando de una negociación que va a llevar casi una década.
-¿Pero ésos son los términos del intercambio?
-Eso es lo que naturalmente cada región tiene como fortaleza, después en cada lugar se ve sector por sector. En líneas generales es lo que se ve como ventaja comparativa de una región y la otra.
-¿El blanqueo puede equilibrar la falta de inversiones en el segundo semestre?
-Lo que prometí es que en el segundo semestre íbamos a bajar drásticamente la inflación, que se iba a sentir el avance de la obra pública y que iban a empezar a llegar inversiones, pero no es algo que llega automáticamente.
-¿A cuánto va a ascender el blanqueo?
-Si logramos una cifra superior a los 25.000, 30.000 millones de dólares, la Argentina va a estar financiando su gradual reducción de inflación. Y eso nos va a permitir que el sector privado por primera vez tenga acceso a crédito de largo plazo y a tasas sumamente bajas.
-Si se diera esa cifra, ¿al Gobierno no le haría falta pedir más crédito en el exterior durante su mandato?
-Así es. Nos retiraríamos del mercado de crédito y eso nos permitiría que todo el crédito de la Argentina vaya para el sector privado. Insisto, va a producir una corriente de financiamiento inédita en nuestra historia.
-¿Por qué para estar mejor primero hay que estar peor?
-Eso pasa cuando en tu casa tu papá te miente y en vez de invertir parte de su salario en mantener la red de gas y los caños de agua va sosteniendo una aparente situación de bonanza que no es tal. Y un día se te cae toda la casa abajo. Esto es lo que le pasó a la Argentina. Sobre la base de un enorme fraude, porque se alteraron las estadísticas de absolutamente todo. Si hubiese habido otra manera de empezar a bajar la inflación, de tener inversiones para tener de vuelta energía, la hubiese tomado. Me duele en el alma, porque sé a cuánta gente le está costando esto, pero espero que crean, que estén seguros de que es lo que tenemos que hacer para volver a crecer y tener trabajo.
-Con estas medidas se afectó a los más pobres, a muchos que lo votaron. ¿Qué les dice?
-Hemos hecho un esfuerzo enorme en ayudar a todos a que puedan cruzar el puente, por eso profundizamos la ayuda social como nunca antes en la Argentina, con la AUH, las asignaciones familiares, las tarifas sociales. Mi compromiso primero es decirles la verdad, porque si no, no se puede construir una sociedad.
-¿No hay errores propios de su gestión, son todas cuestiones de herencia?
-No, obviamente que cuanto uno más hace más se equivoca. Pero nosotros si nos equivocamos, corregimos y seguimos haciendo, porque la dinámica del «hacer» es lo que nos va a sacar adelante.
-¿Por qué cifra concreta le gustaría que sea juzgado su gobierno en 2019?
-Pobreza. Si cuando termino mi presidencia no bajé la pobreza, habré fracasado, más allá de las cosas que hayamos obtenido. Todo lo demás serían excusas. Y la pobreza medida en forma independiente.
-Cristina Kirchner denunció que la persiguen políticamente.
-Hice una promesa y la estoy cumpliendo. Me estoy manteniendo al margen de la tarea de un sistema judicial independiente. En seis meses se han visto más intentos de terminar con la impunidad que en más de 12 años. Este gobierno ha generado un ámbito para que los periodistas trabajen con absoluta libertad, para que la Justicia trabaje con absoluta libertad, para que vuelva el diálogo y para que se abra la Argentina al mundo.
-¿Qué opina del episodio en Tiempo Argentino, donde una patota entró a amenazar a los periodistas y a romper las instalaciones?
-Todo eso está lejos de la Argentina que queremos. Pero me alegra que la Justicia esté interviniendo, como también intervino antes para pedir el desalojo del edificio. O sea, está mal cualquier tipo de usurpación. Me parece peor todavía con el ejercicio de la violencia, pero claramente nadie tiene derecho a usurpar lo que no es de uno.
-¿Se refiere a los periodistas que estaban haciendo su trabajo ahí?
-Claro, claro.
-¿Qué efectos va a tener la auditoría judicial? ¿Puede avanzar el Gobierno con pedidos de juicio político contra jueces que hayan demorado causas?
-Absolutamente. Acá todos tienen que saber que no hay más impunidad. Eso incluye a los jueces, los empresarios, los sindicalistas, los políticos, los periodistas… Todo el mundo tiene que entender que tiene que cumplir con la ley. Sin excepciones. Ésa es una sociedad civilizada.
-No pudo desplazar a la procuradora Alejandra Gils Carbó…
-No, porque es un cargo que no pertenece al Ejecutivo. Ella defendió una causa política, perdió la objetividad que requiere el cargo y no goza de la confianza del Presidente. Pero la mujer insiste en sostenerse en el cargo más allá de todo. Ya el tiempo encontrará la solución.
-Si le ponen por ley un plazo al mandato del procurador, ¿va ser retroactivo?
-Eso lo decide el Congreso. Claramente tiene que tener un plazo, es lógico que no sea un cargo vitalicio.
Fuente: La Nación