Bajo la dirección de Noam Zur, la Orquesta Sinfónica presentará Soirée Française el jueves 6 de diciembre, a las 21, en el Teatro Provincial. Entrada libre y gratuita.
El repertorio está integrado por: Preludios Primer libro de Claude Debussy en versión orquestal de Noam Zur, que se estrena en Latinoamérica, Danzas sacra y profana, estreno en Salta, también de Debussy, y La Valse de Maurice Ravel. Ana Carolina Varvará será solista en arpa.
Claude Achille Debussy fue el iniciador del llamado impresionismo musical. Sus innovaciones armónicas abrieron el camino a las nuevas tendencias musicales del siglo XX, en las que se rechazan las tonalidades clásicas, interesa la sonoridad aislada de cada acorde y la sucesión de los mismos, sin que se establezcan jerarquías tonales. Se emplean recursos que favorecen una percepción más subjetiva de la música, de sensaciones diferentes y propias en cada oyente.
Debussy es considerado el iniciador de las tendencias musicales de la actualidad. Este año se conmemora el centenario de su fallecimiento.
Sobre los Preludios para piano, de Debussy, Noam Zur contó que los escuchó por primera vez siendo adolescente. “Desde entonces he sentido la influencia de este gran compositor impresionista francés, su virtuosismo y sus variados colores compositivos. Mientras estudiaba en la Academia de Música de la Universidad de Tel-Aviv, elegí arreglar para mi examen final de orquestación Des pas sur la neige. Mis capacidades pianísticas me permitieron disfrutar la obra en su forma original y también en mis formas reordenadas. Decidí respetar el límite instrumental dado por Debussy, ya que he descubierto que hay orquestaciones que han perdido la esencia de su compositor. La orquestación de mi versión de los preludios incluye una orquesta relativamente pequeña, conservando la atmósfera íntima de las composiciones. Las sonoridades que elegí fueron sacadas de sus grandes obras orquestales: Preludio a l’apres-midi d’un faune, La Mer, Rhapsodie pour Clarinette”, finalizó el director.
Danse sacrée et danse profane se ubicó entre las más conocidas e interpretadas en el repertorio de conciertos para arpa. Las partes de este instrumento son sorprendentemente convencionales aunque la música está llena de contradicciones armónicas. La primera parte se distingue por los ricos efectos de la cuerda y su pasaje exótico, fascinante. La segunda parte es más rápida y toma la forma de vals.
Junto a Debussy, Maurice Ravel representa la moderna escuela musical francesa. Heredó de su padre, ingeniero suizo, su afición por lo mecánico y de su madre, la atracción por España. Sus dos conciertos para piano y orquesta, sombrío el primero en re menor, luminoso y extrovertido el segundo en Sol mayor, ejemplifican a la perfección este carácter dual de su personalidad. Su Rapsodia española, La valse y el Bolero, son un auténtico ejercicio de virtuosismo orquestal en la combinación de los diferentes instrumentos, desde el sutil pianissimo del inicio hasta el fortissimo final.