Otro policía en Tartagal relacionado al caso del robo, venta de motos y por ser infiltrado, se entregó voluntariamente. Hace unos días un sargento fue detenido por esta causa. Ambos de la Comisaría 42 hacían negociados hasta que la exnovia de uno de ellos dio las pruebas para desbaratar la banda.
El sargento Alejandro Albarracín, que cumplía funciones de civil y en investigaciones de la 42, fue detenido días atrás luego de que su exnovia se apersonara a esa comisaría con dos chips en la mano en los que se encontraban los mensajes clave para involucrar a Albarracín con una banda para la que cumplía las funciones de informante: el sargento tiraba indicaciones de posibles denuncias, allanamientos, secuestros y otros procedimientos que se llevaban adelante en esta dependencia. Posteriormente, personal de la Brigada de investigaciones fue hasta la casa de Albarracín realizó una requisa y desde la Jefatura regional Nº4 suspendieron de sus funciones al hasta ese entonces sargento. Albarracín se presentó en la fiscalía y quedó detenido, hasta ahora se negó a hablar con el Juez.
El fin de semana pasado cayó el segundo cómplice, en este caso otro sargento, de nombre Carlos Tapia, quien estaba encargado del depósito donde se guardan las motos y otros elementos provenientes de los distintos secuestros realizados por la policía. Cabe recordar que Tapia es cuñado de Albarracín y fue el sábado pasado cuando se presentó “voluntariamente” en la dependencia señalada para devolver una moto parte de un secuestro pero que desde hace más de un año tenía en su poder, así como una importante suma de dinero (no se dieron datos de la cantidad exacta) que aseguró era producto del cobro de contravenciones. “Lo hice con la autorización de mis superiores”, dijo el sargento pero no dio nombres como tampoco firmó el acta de entrega de la moto y del dinero.
El domingo Tapia quedó detenido acusado de los delitos de falta a los deberes de funcionario público, apropiación indebida y supuesto peculado. Posteriormente fue indagado por el fiscal penal Armando Cazón en el marco de la investigación que involucra también a Albarracín.
