Las sesiones en Diputados de la provincia cada vez son más graciosas.  

En la jornada de ayer, se trató el proyecto de ley de Silvina Avilés, para que si llegara a existir la posibilidad de que el Gobierno Provincial pueda adquirir vacunas cuente con el instrumento legal para hacerlo. La iniciativa fue aprobada por unanimidad en Senadores.

El debate duró siete horas, pero no por elllo fue alto el contenido intelectual de los discursos. Por su parte, Manuel Santiago, en su papel de maestro ciruela (no en vano fue presidente de la Cámara durante 18 años), se va poniendo verde, mientras el debate se va caldeando. Su principal rival en el recinto fue Socorro Villamayor, que vendría a ser la alumna aplicada del grado (y la hija de la directora), ya que nadie entiende el reglamento mejor que ella. Entre ellos dos se da el debate de mayor altura los martes por la tarde en Mitre 550, que nunca se trata de política, ni de proyectos.

Al cabo de cinco horas y media de que cada Diputado analice los pro y los contra de comprar vacunas, sin aplicar en ningún caso la lógica y diciendo exactamente lo mismo unos y otros, pidió la palabra Daniel Sansone, quien intentó pasar en limpio la situación.

«En esto no hay opositores ni oficialistas, todos peleamos por lo mismo. Mientras acá todos levantamos la mano para decir lo mismo, afuera la gente se está muriendo. Es fácil para nosotros los que cobramos el sueldo a fin de mes perder tiempo en estas cosas. Mientras tanto allá afuera los comerciantes no pueden más y cierran». Al margen de su ideología política, cercana al gobierno, primó en él el sentido común, cosa bastante poco común en ese cuerpo de legisladores. Aunque no dejó la chicana, diciéndole a Germán Rallé que estuvo muy bien su «discurso proselitista», sabiendo que todo lo que dice en estos momentos es porque está de campaña política.

Franco Berni de Tartagal felicitó al gobernador por haber iniciado esa campaña masiva de vacunación en Capital, durante el fin de semana pasado y lo invitó a hacerla en el norte también para que no queden vacunas guardadas. «¿Para qué comprar más vacunas si todavía no se usaron todas que tenemos?»

El mismo Sansone presentó una cuestión de privilegio respecto a su par Omar Exeni (de la misma escuelita de Jarzún) y pidió la conformación de una comisión que investigue su comportamiento, ya que es de público conocimiento que el legislador y comerciante cobró los ATP de sus empleados.  A esa votación la perdió por cinco votos (27 a 22), el resto de los diputados no estuvieron presentes, cuatro de ellos y se abstuvieron siete de dar su opinión al respecto. Con esto queda claro que el oficialismo prefiere no investigar.