Se trata del médico forense Luis Ernesto Vilá, quien se encuentra suspendido desde el 2 de febrero por la denuncia de una empleada del Poder Judicial de Salta.

El médico psiquiatra estaba suspendido desde el 2 de febrero por la denuncia de la victima
también empleada del Poder Judicial. Por la imputación informaron que ya comienza a correr el plazo para que se desvincule de la causa o bien puede quedar cesanteado con causa.

La víctima denunciante es empleada de servicios generales. Si bien se dio a conocer que en sus antecedentes poseía denuncias de otras dos mujeres, desde el Poder Judicial señalaron que estas causas «estaban cerradas por prescripción» y los hechos denunciados se habrían producido mientras se desempeñaba en su consultorio privado.

La fiscal Luján Sodero Calvet, de la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual, imputó al médico que se desempeñaba en el Servicio Médico Forense del Poder Judicial de la provincia.

Sobre Vilá de 64 años de edad, pesan tres hechos de abuso sexual simple en perjuicio de una mujer; abuso sexual simple en perjuicio de una persona menor de edad, y abuso sexual simple en perjuicio de otra joven.

El psiquiatra concurrió a la audiencia de imputación con la asistencia de un defensor oficial y dió su versión de los hechos.

El Ministerio Público Fiscal de Salta informó que comenzó a intervenir en este caso el 1 de febrero, luego de que una mujer denunciara que en tres oportunidades había sido sometida a tocamientos por el médico psiquiatra. La denunciante detalló que el primer abuso sucedió en junio de 2023, mientras ella realizaba tareas en la oficina del Servicio Médico Forense. Describió que el hombre cerró la puerta del despacho y comenzó a tocarla hasta que ella logró zafarse, aunque luego por temor a perder su trabajo no dijo nada.

Luego, en diciembre último, se repitió la misma situación: una vez más el psiquiatra forense cerró la puerta de la oficina y la tocó a pesar de su negativa. La denunciante contó que le comentó a un compañero de trabajo lo que le sucedía y éste le sugirió que lo denunciara laboralmente o que pidiera el traslado de área.

La mujer relató que decidió evaluar sus opciones para tomar una determinación sobre qué camino seguir y mientras se encontraba en esas circunstancias volvió a sufrir otro abuso de parte del mismo hombre, lo que la decidió a denunciarlo ante las autoridades laborales del Poder Judicial y en la Justicia.