Es la forma de “revelarse” que utilizan 55 detenidos alojados y hacinados en la comisaría 42 de Tartagal. Arrojan todo tipo de elementos al único baño que comparten. Las cárceles del interior saturadas.

Los detenidos deben ser distribuidos en diferentes dependencias policiales. Otra opción sería trasladarlos al penal Nº 5, pero también está sobrepasado en su capacidad, informaron medios locales. Por este motivo, los presos alojados en la comisaría 42 de Tartagal como modo de protesta,  arrojan todo tipo de elementos (ropa interior, medias y hasta zapatillas) al único baño del que disponen, lo que causa permanentes inconvenientes en las cañerías del sistema cloacal.

“En la mañana de ayer efectivos policiales tuvieron que hacer un trabajo totalmente insalubre y sin las mínimas condiciones de higiene: arrojar baldes repletos de líquidos cloacales sobre las calles España y Belgrano”, informó El Tribuno.