Cinco años de prisión para un hombre que vendía pasta base en el barrio 20 de Junio. En proceso abreviado, la jueza María Victoria Montoya lo declaró reincidente por segunda vez. En el mismo fallo, se condenó a otro sujeto a cuatro años.

La jueza María Victoria Montoya, vocal de la Sala II del Tribunal de Juicio, condenó en proceso abreviado a Juan Pablo Herrera (58) a la pena de cinco años de prisión y multa por resultar autor material y penalmente responsable del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización. La jueza declaró a Herrera reincidente por segunda vez y ordenó que continúe alojado en la Unidad Carcelaria local.

En el mismo fallo resultó condenado Fredy Julio Suárez Mercado (44) a la pena de cuatro años de prisión y multa por resultar autor material y penalmente responsable del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización. En su caso, la jueza ordenó que cumpla la condena impuesta en forma de prisión domiciliaria, previa constitución de domicilio y fianza personal de su concubina, y bajo estricto control del Patronato de Liberados.

La investigación policial que derivó en la detención de ambos imputados se inició a partir de una denuncia anónima presentada en febrero de 2014, en la que se precisaba que en barrio 20 de junio “un tal Fredy” comercializaba pasta base de cocaína. La venta se llevaba a cabo en un domicilio donde funcionaba un almacén dedicado a la venta de quesos y huevos originalmente. A partir de una intervención telefónica se determinó que el imputado actuaba en complicidad con Juan Pablo Herrera. A partir de este dato se ordenaron tareas de seguimiento que dieron como resultado el hallazgo de varios envoltorios de sustancia blanquecina (cocaína) en poder de Herrera.