En una escueta nota, enviada desde la cárcel, el edil cambió de opinión en un día.

El concejal de Orán Ramón Rodríguez está acusado de abuso sexual. Actualmente está detenido, debido a que las pericias médicas realizadas a la víctima apenas presentó la denuncia confirman al menos que fue violada.
Ayer se dio una comedia de enredos en el Concejo Deliberante, que hoy le permiten a Rodríguez seguir siendo edil.
Por un lado, Rodríguez envió una breve carta de renuncia, anticipándose a que en la sesión iba a ser destituido. Quizá pensó que era más honorable irse sin que lo echen. Pero la sesión fracasó: uno de los ediles se fue y no alcanzaron los dos tercios necesarios, así que no pudieron echarlo; tampoco pudieron aceptarle la renuncia.
Así, como por arte de magia, Rodríguez sigue siendo edil.
Al ver toda esta ineptitud, hoy desde la cárcel, el edil decidió dar marcha atrás a la renuncia. Ahora solicita licencia sin goce de haberes.
Cosas que sólo pasan en Salta.