El economista porteño invitado por el diputado nacional de la campera amarilla mostró toda su misoginia y elitismo cuando tras una pregunta de una periodista atronó agravios y desmereció el planteo. Ni siquiera Olmedo se solidarizó públicamente con la víctima del acto de violencia. (Claudia Álvarez Ferreyra)
El mediático economista Javier Milei se presentó el 26 de junio en Metán invitado por el diputado nacional Alfredo Olmedo. A las 20:00 estaba prevista una charla en el marco del ciclo de conferencias “Claves para interpretar la Argentina” en el Colegio de Abogados de la ciudad, donde hicieron acto de presencia el intendente, Fernando Romeri —entre otros políticos— y un público estimado de 40 personas.
Lejos de enseñar economía, Milei dio muestras de su misoginia al gritar e insultar a la periodista Teresita Frías tras una pregunta que ella le realizara sobre el keynesianismo. El hecho cobró relevancia nacional a través de los medios de comunicación y se pronunciaron en rechazo a la violencia ejercida tanto periodistas como organizaciones sociales y feministas, el instituto de género del Colegio de Abogados de Salta, y hasta economistas que le dieron la razón a la comunicadora y sostuvieron que la pregunta estaba bien formulada. También se conoció que horas después Milei maltrató a una moza en el lugar al que fue a comer.
La charla se promocionaba como “libre y gratuita […] destinada al público en general interesado en interactuar con el licenciado”. Teresita Frías, al ser consultada por Cuarto Poder, opinó que Milei no supo ubicarse en el contexto en que se encontraba porque no era una conferencia destinada sólo a economistas.
El defensor de la economía liberal capitalista enfureció ante la pregunta: “Teniendo en cuenta las políticas keynesianas […] se aplican en EEUU. ¿Por qué considerás que en EEUU desde el New Deal en adelante funcionaron y aquí en Argentina no?”. A lo que Milei reaccionó de la peor forma, elevando el tono de voz: “Vos sabes en qué año fue la Gran Depresión […] entre 1929 y 1933, ¿vos sabes en qué año se publicó la mierda esa de la teoría general? […] En 1936. ¿Vos me querés explicar cómo hizo Roosevelt para aplicar las políticas del keynesianismo de un libro que todavía no había sido escrito? [… ] ¿Sabes por qué se llama The Great Contraction ese capítulo? […] Acabás de decir una burrada y lo que yo estoy haciendo es tratar de desasnarte […] ¿Te queda claro que dijiste una burrada?, yo ahora te estoy tratando de desasnar”. Luego leyó un párrafo del prefacio de la teoría general… “te lo voy a leer despacito para que lo entiendas”… “¿Alguien tiene dudas de que Keynes era un totalitario?, me parece que la única que tiene dudas en esta sala sobre eso sos vos”. Entonces Frías le respondió “simplemente hice una pregunta y no sé cómo reaccionó de esta manera tan fuerte”… Como contrarrespuesta Milei arremetió a los gritos: “si vos decís que el mundo salió de la gran depresión del 29 y el 33 con un libro del 36, tenés que darte cuenta que no te dan las fechas […] hablás de keynesianismo y no leíste nada de keynesianismo, no sabés nada de keynesianismo. Solamente estoy diciendo que sos una burra y que hablás de cosas que no sabes […] pluralidad de voces no es que 2 más 2 es igual a 5825, 2 más 2 es 4, no es una cuestión de apreciación artística, 2 más 2 es cuatro. Lo que dijistes es una burrada, hablaste de cosas que no sabes, de qué me venís a hablar, la totalitaria sos vos que te ponés a opinar de cosas que no sabes un carajo”.
«Solamente estoy diciendo que sos una burra y que hablás de cosas que no sabes […] pluralidad de voces no es que 2 más 2 es igual a 5825, 2 más 2 es 4, no es una cuestión de apreciación artística, 2 más 2 es cuatro. Lo que dijistes es una burrada». Javier Gerardo Milei
Tras un momento la periodista le cuestionó si también hacía falta el tono fuerte y el economista contestó que “sí, porque cuando uno se encuentra ante una base impenetrable, te leí cuatro veces un párrafo de la teoría general y no lo entendiste, entonces en realidad tu problema, es un problema de soberbia, que no sabés un carajo y opinás de lo que no sabés […] y además encima me lo querés cargar a mí […] no es una cuestión de apreciación personal porque mirá si se te ocurre hacer un puente con tus ideas vas a matar a un montón de gente”.
Al final de la alocución, el periodista Rodrigo García le exigió al economista que pidiera disculpas a su colega, a lo que Milei se negó y lo trató de populista impresentable. En ese momento eran ya varias personas las que abandonaban la sala, indignadas, ante la falta de respeto de Milei, sin embargo, los representantes políticos que estaban presentes no fueron capaces de ponerle un alto.
Él, burro
Para el profesor de la Metropolitan State University – Denver, Nicolás Cachanosky, y el economista fundador de CEMA, Carlos Rodríguez, no hubo error en la pregunta. En twitter, Rodríguez posteó “La periodista tenía razón, Keynes influenció a Roosevelt en diseñar el New Deal, además USA ha sido keynesiano después de la General Theory. Nixon lo dijo”. Cachanosky al ser consultado por un medio nacional expresó que “Milei dice que el libro se escribe después, por lo cual no puede haber afectado. Es cierto que el libro se escribe en el 36, pero sus ideas se venían discutiendo varios años antes. Lo que John Maynard Keynes hace en el libro es describir lo que ya se venía aplicando […] De hecho hay correspondencia entre Keynes y el presidente Franklin Roosevelt años antes de que él escribiera el libro. Keynes ya era asesor de políticos en 1931”.
Teresita Frías asegura que la reacción de Milei se debió a su condición de mujer porque señala que después hubo otro hombre que hizo preguntas y no sufrió tal atropello. El Instituto Jurídico con Perspectiva de Género del Colegio de Abogados/as de Salta le da la razón: “Milei en una clara actitud misógina le respondió de una forma irracional, desproporcionada. Como abogadas integrantes del Instituto de Género del Colegio de Abogadxs de Salta queremos dejar en claro que nuestras sedes son espacios para la formación académica, el debate y la reflexión entre pares en una posición de igualdad y no así para que se ejerza violencia hacia las mujeres como el caso de público y notorio conocimiento, encuadrando este hecho en la ley 26485 de violencia hacia las mujeres y violando los tratados internacionales de DDHH de las mujeres. Nos solidarizamos con la periodista Teresita Frías. Pedimos retractación pública del agresor y de quienes lo invitaron a dar exposición máxime cuando son funcionarios públicos que deben garantizar el respeto hacia las mujeres en todos los ámbitos en que se desarrollen sus relaciones interpersonales”, manifiestan en un comunicado.
La periodista violentada cree que el diputado nacional Alfredo Olmedo debe pedir disculpas públicas porque fue él quien invitó a Milei a dar la charla. El legislador sólo se disculpó en privado al terminar la conferencia. Frías sostiene: “Olmedo también forma parte de esa sociedad machista, que naturaliza la violencia, ya tiene antecedentes de misógino con todos sus dichos sobre las violaciones. Lo que me duele es que como representante del pueblo no se haya pronunciado el intendente, que no se haya puesto un parate y haya dicho ‘acá en esta ciudad no se permite el maltrato’ […] Es parte de esa sociedad que naturaliza la violencia y tiene miedo a las represalias del carácter fuerte que expone en su show Milei porque para mí es toda una puesta en escena lo que hace y enfatiza en los improperios y en el mal carácter”.
Persona no grata
Quien actuó de oficio fue el Juez de Violencia familiar y de Género de Metán, Carmelo Paz. El funcionario dispuso que Javier Gerardo Milei debe “abstenerse de ejercer actos de violencia en contra de la periodista Teresita Frías”. No podrá proferir insultos, amenazas descalificantes o usar palabras agraviantes. En la resolución adedmás le prohibió participar en calidad de disertante o panelista en cualquier charla o reunión pública de organizaciones estatales o no en la ciudad de San José de Metán, bajo apercibimiento de ley. El expediente queda habilitado durante el próximo período de Feria Judicial a los efectos de que se fije y celebre audiencia.
Frías no fue la única que sufrió maltratos por parte de Milei en su paso por Metán. También lo padeció Karina Banegas, la moza de una confitería a la que fueron a comer. El Tribuno publicó este hecho detallando que al servirle la comida Milei tiró los cubiertos sobre la mesa —luego de cortar un bife— y le gritó a la mujer “yo lo pedí jugoso y esto está seco. Estuve media hora esperando y mi tiempo vale oro”. Al cambiarle el pedazo de carne, reiteró la misma acción de tirar los cubiertos y a los gritos le dijo “me lo voy a tener que comer así, porque mi tiempo vale oro”. El economista no accedió a disculparse ante el pedido que le habrían realizado quienes lo acompañaban.
Pero Milei sí pidió disculpas en el programa Intrusos —aunque también solicitó que Frías lo hicera también por haberlo llamado “totalitario”, acusación que la comunicadora desmintió—, y en el programa Lanata Sin Filtro sólo se justificó a sí mismo: “Lo primero que hace es increparme sobre Keynes, que no hacía al tema, y todos saben que yo con Keynes tengo una cuestión patológica”. Insistió en decir que la periodista “preguntó un montón de cosas y no sabía nada”; “que increpe sin saber es una falta de respeto”.
