Había nacido por cesárea el 26 de febrero en el Hospital Eva Perón de la capital provincial. La niña violada y su madre habían pedido una Interrupción Legal del Embarazo (ILE) y la objeción de quienes pregonan salvar las 2 vidas, la obligó a ser madre.
«La Dirección Médica del Hospital Eva Perón hace saber que ha fallecido hoy a las 15.30, la paciente de sexo femenino nacida el pasado 26 de febrero de 2019, con 25 semanas de gestación y 660 gramos de peso», comunicó el Ministerio de Salud de la provincia norteña.
El centro de salud remarcó que «a pesar de los cuidados extremos brindados desde su nacimiento, la beba sufrió una complicación respiratoria grave que produjo su deceso».
La niña víctima de la violación y su madre habían pedido una Interrupción Legal del Embarazo (ILE) en la semana 16 de gestación, pero las autoridades del Ministerio de Salud local demoraron la práctica hasta la semana 23.
En consecuencia, la beba, que en la provincia se conoce como «Faustina», nació viva y estaba internada en Neonatología.
Agrupaciones feministas y organizaciones defensoras de los derechos humanos denunciaron que el sistema de salud tucumano dilató la decisión y cuestionaron que la cesárea no fue el procedimiento idóneo en estos casos.
La niña de 11 había sido violada por la pareja de su abuela.
Esta muerte se suma a la de la beba jujeña que falleció en enero y que también había nacido prematura por cesárea a una niña de 12 años que también había sido violada.