De los 11 espacios que competían por la Presidencia en 15 fórmulas , 5 no lograron llegar al piso electoral del 1,5% de los votantes estipulado por la ley electoral y se quedarán sin poder competir en las generales de octubre. Andrea Sz.
La ley electoral determina que los candidatos presidenciales que no obtengan un mínimo de 1,5% de los votos válidos en las primarias de ayer, quedarán descalificados y no podrán inscribirse para las elecciones generales de octubre. En el tramo de candidatos a diputados nacionales se requiere también que una lista obtenga el 1,5% de los votos válidos en el distrito por el que se presenta. De esa manera, un partido puede tener un candidato presidencial en octubre que sea acompañado por listas de diputados en algunas provincias sí y en otras no.
Un total de 32.037.323 argentinos estuvieron habilitados para participar en estas Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), para las que se habilitaron un total de 94.979 mesas. La concurrencia efectiva al cierre de esta edición y con el 30,65% de las mesas escrutadas, fue del 73%: es decir, 24 millones. Eso significa que todos los candidatos a presidente deben llegar a 360 mil votos para pasar a las generales. En el caso de nuestra provincia estuvieron habilitados un total de 953.898 electores, representados en el 2.97% del padrón a nivel nacional.
En estas elecciones hubo 15 precandidatos a presidentes, de ellos sólo tres fueron mujeres: Progresistas lista N° 132 “Igualdad y Decencia” que llevó a Margarita Stolbizer, como presidente y a Miguel Ángel Olaviaga, a vicepresidente; Cambiemos Lista N° 135 “República de Libres e Iguales” que llevó a Elisa Carrió y a Héctor Flores; y Movimiento al Socialismo Lista N° 13 que llevó a Manuela Castañeira, a candidata a presidente y Jorge Ayala, candidato a vice.
Once Agrupaciones o Alianzas presentaron pre-candidatos a la presidencia de la Nación. De ellas 3 tuvieron Primarias competitivas, en las que se presentaron más de un candidato: Unidos por Una nueva Alternativa (De la Sota vs. Massa), el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (Altamira vs. Del Caño) y Cambiemos (Carrió vs. Macri vs. Sanz).
La enorme popularidad de Adolfo Rodriguez Saá en San Luis, donde sacara la mayoría de los votos 44, 72%, logró que pueda llegar a octubre. El precandidato a presidente por Compromiso Federal, había vaticinado una buena elección a sus ex aliados De la Sota y Massa, a quienes tildó de cometer un «error político y una mala decisión» de ambos dirigentes al excluirlo de la posibilidad de ir a las PASO en el mismo espacio.
Como propuesta de campaña, Saá promete la construcción de 500 mil casas por año y la creación de un Fondo Nacional de la Vivienda. Para ello el ciudadano, según Saá, pagará solo una cuota mensual de $900. Con más del 70% de los votos escrutados en la provincia de San Luis, Saá sacó más del 55% de los votos y se impuso a Macri que en la provincia puntana ocupó el segundo lugar.
Volver a casa
Aunque Víctor De Gennaro del Frente Popular había pedido el “voto útil para poder superar las PASO”, sus expectativas quedaron truncas. El precandidato que prometía “erradicar el hambre y resolver la pobreza con 3 millones de puestos de trabajo”, en su cierre de campaña había exhortado a “conseguir los 500 mil votos que necesitamos para superar las Paso”. Pese a su pedido, De Gennaro se quedará sin participar en las próximas elecciones. Con el 31% de las mesas escrutadas sólo alcanzaba el 0,47% de los votos productos de solo 32.242 votos. Nuestra provincia aportaba a ese número al cierre de esta edición 2.146 voluntades.
En el caso de Alejandro Bodart, del MST quien fue acompañado de la dirigente de mujeres Vilma Ripoll como candidata a vicepresidenta, tampoco logró llegar al piso del 1,5% estipulado. “Somos una propuesta socialista, ecologista y feminista que presentará candidatos en unas 20 provincias. Nuestras listas estarán llenas de jóvenes luchadores, referentes de las luchas ambientales y de género, y nuevos delegados sindicales. Pedimos que nos voten en las PASO para superar el piso antidemocrático y para fortalecer el proyecto estratégico de una nueva izquierda que avance como alternativa de gobierno.”, había mencionado el precandidato en su cierre de campaña.
Manuela Castañeira del Nuevo MAS, una de las tres mujeres en presentarse a candidata a presidenta tampoco logró sacar el piso estipulado para pasar las PASO. Castañeira de 30 años oriunda de Entre Ríos y quien se presentara como la candidata más joven fue también la única en presentar un programa completo para abordar las problemáticas de género. Entre ellos, la propuesta de avanzar en una legislación favorable al aborto en los hospitales. Como propuesta en la plataforma de “Aborto, Anticoncepción y Salud” que el nuevo MAS proponía se encontraba “Aborto legal, libre y gratuito en los hospitales públicos y obras sociales; Reglamentación del aborto no punible y plena aplicación del mismo en todo el país; Designación de autoridades hospitalarias y personal ministerial comprometido con el respeto del derecho a decidir de las mujeres; Fuera la Iglesia de los hospitales públicos; Prohibición a los curas o militantes religiosos de interferir con los procedimientos hospitalarios; Anticonceptivos gratuitos y de calidad en los hospitales; Programas de capacitación en anticoncepción.”
Con 32.529 votos nacionales que representaban un 0,45% de los votos, la joven oriunda de la provincia de Entre Ríos queda fuera de competencia.
Los otros dos candidatos que no lograron superar las PASO son Raúl Albarracín de Movimiento de Acción Vecinal y Mauricio Yattah del Partido popular. El primero un cordobés que fue legislador provincial entre 2007 y 2011 por el partido Recrear, ligado al exministro de Economía Ricardo López Murphy. Antes de ingresar a la política se desempeñó en el grupo alimentario Arcor y en otras empresas del sector privado. Albarracín en su provincia apenas sacó el 0,31% con cerca del 80% de los votos escrutados.
Yattah en tanto era la primera vez que se postula para un cargo electivo. Es contador y su única participación en la actividad política hasta ahora fue en la discusión que se dio hace un lustro en la Ciudad de Buenos Aires en torno a la ley de creación de comunas, distritos en los que finalmente se dividió la ciudad.