La multinacional de origen australiano Liag, que utiliza el 50% del cauce del río Juramento y lleva desmontadas 40 mil hectáreas, muestra las amplias ventajas que tiene pese a no dejar un centavo en El Quebrachal. 30 años de extrativismo salvaje. 

El comportamiento de las grandes empresas asentadas en la provincia deja mucho que desear. El caso de Liag, empresa ubicada en Finca Tolloche, Anta, de la familia Kahlbetzer, es un ejemplo más del modelo extractivista y miserable que se ha instalado en la provincia.

Para dimensionarla es necesario tener en cuenta que se trata de una firma que maneja a nivel mundial una producción cercana a las 450 mil hectáreas. Su dueño, el australiano John Dieter Kahlbetzer, se encuentra entre las  50 mayores fortunas de Australia con un patrimonio de más de 800 millones de dólares.

En el momento de instalarse en suelo salteño tuvo como producción principal el algodón, para luego rotar y diversificarse en cultivos tales como trigo, soja y maíz. Con el paso de los años crecieron las facturaciones de Liag pero no así los beneficios para los habitantes de la zona. Peor aún, algunos servicios fueron tercerizados a empresas que llegan desde otros lugares para complementar el trabajo de trilla y siembra, sin siquiera absorber mano de obra local.

Bayer y Liag: explotan la producción de Maíz en Anta

La empresa Liag Argentina S.A trabaja en sociedad con la multinacional alemana Bayer- Monsanto. Siembran maíz para la cosecha de la “Flor Macho”, que se obtiene de las espigas que se producen en la parte alta de la planta.

La multinacional Bayer, a partir de la adquisición de Monsanto, conocida por los prejuicios al medio ambiente y como el mayor fabricante de semillas con biotecnología del mundo, incursiona en la industria agrícola con aspiraciones de dominar el mercado. De esta forma con Liag empieza a operar en tierras de Anta, cuestión que ameritaría la solicitud de algún tipo de informe que especifique los métodos de la producción, los niveles del uso de agro-tóxicos y efectos ambientales e impacto en la población lindante a sabiendas de los daños conocidos y habituales que generan.

Hay que tener en cuenta que el 24 de junio de 2020, Bayer dio a conocer que en Estados Unidos indemnizaría por más de 10 mil millones de dólares a las personas afectadas por un herbicida, producido por Monsanto, que contenía sustancias cancerígenas como el glifosato. Y saber de lleno cuáles serían las causas precisas de los graves problemas de salud de los pobladores de la localidad de Nuestra Señora de Talavera que el Senador por Anta, Marcelo “Teno” García, denunció en una entrevista con Cuarto Poder.

Cerca del poder político

Desde que Liag se instaló en Anta, tuvo varios administradores con fuertes vínculos con el poder. Fernando Luis D’angelo, por ejemplo, fue gerente de la firma e integrante al mismo tiempo del organismo a cargo del Consorcio de Regantes de Anta creado por Juan Romero. Posteriormente, fue secretario de Asuntos Agrarios antes que Paz Posse.

En una entrevista realizada por el sitio oficial de la Sociedad Rural de Salta, sobre su rol de Secretario de Asuntos Agrarios, Luis D’angelo, hace referencia a un período corto propuesto por la (ex) ministra Paula Bibini, durante el cual tomó el cargo de Secretario de Recursos Hídricos.

Según declaró Dangelo en el sitio de La Rural Salta el uso de las aguas del rio Juramento “permite mejorar ampliamente los rendimientos de los cultivos, como así también diversificar la producción, incorporando nuevas alternativas que mejoran en forma considerable los márgenes financieros de los productores”.

Sin beneficios para la zona  

“Tenemos que soportar que Liag traiga trabajadores de otras provincias en desmedro de los trabajadores rurales de Anta”, dijo en una entrevista con nuestro semanario, el senador por Anta, Marcelo García.

Denunció que la empresa desmontó 40 mil hectáreas de bosques y la extracción del 50% del caudal del río juramento para el abastecimiento de 4 represas. También, la fumigación a cielo abierto con agrotóxicos, causando graves problemas de salud e incluso recordó la muerte de un empleado de la firma.

Como quedó dicho, el sistema de riego se provee del cauce del río Juramento y abastece a cuatro represas de unas 200 hectáreas a través de un canal, que en su recorrido, cruza por la ruta nacional N° 16. Se calcula que extrae aproximadamente un 50% del cauce del río, por lo que, estaría generando graves daños a la biodiversidad del río, y mayores daños aún, en el tramo que recorre por la provincia de Santiago del Estero, donde los pobladores de esas zonas históricamente sufren por la falta de agua.

La disposición de estos recursos hídricos se obtuvieron al inicio de las actividades de la empresa durante el gobierno de Juan Carlos Romero, quien creó el Consorcio de Regantes de Anta, que maneja las aguas para el riego en el departamento, y del gobierno nacional de aquel entonces (Carlos Menem) por considerarse que el canal atraviesa una ruta nacional.

El consorcio cobra un canon para la explotación del río de forma indiscriminada. Está integrado por las empresas de producción agrícola ganadera que operan a en la zona. Curiosamente el consorcio está constituido Liag y el feedlot del poderoso banquero Jorge Brito- Inversora Juramento- entre otras. Mauricio Romero Leal, secretario de Recursos Hídricos, en actualidad, llamativamente, no se refiere al tema.

Cambio climático y daños en la Salud 

El pueblo de Nuestra Señora de Talavera es una localidad que ha quedado dentro de los márgenes de la finca Tolloche, base de Liag, y que, en los últimos tiempos, habría sido afectada por el cambio climático que generan los desmontes en la zona. Este año y años anteriores, el paso de huracanes produjeron destrozos considerables en las viviendas y la caída de árboles por las fuertes ráfagas de viento. Situación que en ningún caso ha tenido colaboración que se sepa de la empresa para resarcir daños.

 Asimismo las fumigaciones aéreas habrían producido perjuicios en la vegetación doméstica y afecciones en algunos empleados; patologías como manchas en la piel, incluso muertes sospechosos a causas de cáncer de ex empleados durante los años que lleva operando la empresa. Sobre estos estragos no se estaría contando con estudios que den aval científico para asegurar en el caso puntual de Liag, pero es sabio que los agro-tóxicos utilizados normalmente en grandes extensiones de campo han venido afectando de manera sistemática la salud de las personas que viven en las cercanías. Siendo esta situación una más de las que ocurren en el diferentes puntos del país.