Ya pasaron casi cuatro años de la transición entre Cristina Kirchner y Mauricio Macri que debía realizarse el 10 de diciembre de 2015, pero que por motivos que jamás revelaron nunca ocurrió. Ahora Juan Carlos Pallarols, el orfebre que confecciona el bastón presidencial desde 1983, contó una historia impensada por tratarse de dos líderes políticos.

Pallarols guardó el secreto por más de tres años, pero en los últimos días cambio de parecer. Tal vez porque no quiere que la historia se repita, el artesano aseguró en La Nación+: «Un día me llama una persona que dice ser del gobierno entrante, yo nunca lo pude comprobar, y me pregunta si yo le había prestado el bastón a la presidenta Kirchner para que le hiciera una macumba».

La respuesta del artesano fue breve, pero no por eso menos contundente. «No sé si reírme u ofenderme», reaccionó ante su interlocutor, que nunca pudo identificar ni comprobar si efectivamente se trata de un asesor de Cambiemos.

La historia que el artesano contó en la televisión -en varios programas tras su primera aparición- fue ratificada por una de sus protagonistas. Cristina, al presentar su libro «Sinceramente» en La Matanza este fin de semana, agregó condimentos al relato: «Esa historia, que ahora cuenta Pallarols, que es cierta, yo la sabía. Tenía la primicia».

«El año pasado un muy amigo mío cumplía 25 años de casado. Por eso fue a verlo a Pallarols para que le haga una flor de plata para su esposa», continuó la senadora. Su amigo luego le transmitió lo que le dijo el orfebre: «Dicen que yo se lo presté a Cristina para hacer una macumba».

 

Para la expresidenta, la historia de la «macumba» sobre el bastón presidencial «corrobora la locura que significó el traspaso de poder el 10 de diciembre de 2015».

Macri nunca habló en público sobre la revelación de Pallarols, pero lo cierto es que el Presidente comenzó su gestión con un bastón nuevo, uno fabricado por el artesano Damián Tessore, oriundo de Mercedes.