El ministro de Trabajo fue a la legislatura para dar cuenta del conflicto entre trabajadores azucareros y el ingenio El Tabacal que pretende quitar la tutela sindical al gremio. Eduardo Costello dijo que eso lo resuelva la justicia.

“Se pudo aclarar la situación de los trabajadores del Ingenio El Tabacal”, declaró el ministro de trabajo tras presentarse a un requerimiento de la Comisión de Asuntos Laborales que preside el legislador Claudio Del Plá.

En realidad Costello aclaró mal solo la postura de su propio ministerio al declarar a FM Aries  que la preocupación de su área es que “los casi dos mil trabajadores que la integran tengan el mejor acuerdo salarial posible, y las mejores condiciones de trabajo por la implicancia e importancia que tiene en el movimiento económico de Orán los salarios de esta empresa” y en relación a la situación del Sindicato que denuncia persecuciones, el Ministro de Trabajo aseguró que “hay una denuncia penal que se canaliza a través de la justicia, nosotros somos ajenos a eso. Hay que ver que cada parte haga su planteo en la justicia y lo defienda a través de sus abogados. Nosotros no tenemos nada que ver”.

¿Qué le faltó decir al ministro? Lo que informó Cuarto Poder hace una semana: que el Ingenio recurrió a la Justicia con el objeto de Excluir de la Tutela Sindical a cuatro miembros de la Comisión Directiva del Sindicato de Trabajadores del Azúcar ´a los fines de permitir el despido con causa a cada uno de los denunciados en los términos del art. 242 de la Ley 20.744”, precisa el escrito.

La segunda cuestión es que el letrado que lleva adelante esa arremetida es el poderoso operador judicial y amigo personal del gobernador, Horacio Aguilar, en cuyo curriculumse inscribe el haber sido juez federal de Jujuy, Camarista Federal de Salta, Asesor del gobernador Urtubey y defensor del zar azucarero Pedro Blaquier cuando fue enjuiciado por su participación en los tristemente célebres Apagones de Ledesma en julio de 1976.

La actuación del Ingenio posee objetivos estratégicos y coyunturales según los trabajadores son comunes a los ingenios de Salta y Jujuy que desde el 2008 dieron un notable impulso a la acción colectiva. El proceso supuso en estas dos provincias una recuperación del salario real y de la discusión colectiva sobre las condiciones de trabajo no salariales, designación de delegados en los lugares de trabajo y un notable fortalecimiento de los sindicatos como espacio de articulación social tanto en Orán y Campo Santo en Salta, como en Ledesma y La Mendieta en Jujuy.

Con respecto a los objetivos coyunturales, dicen los trabajadores, sería dilatar las paritarias que deberían comenzar a fines de este mes hasta que concluyan las negociaciones entre ingenios y gremios tucumanos. Todos descuentan que allí se reeditará lo de años anteriores: acuerdos tucumanos con techos bajos que condicionen las aspiraciones de salteños y jujeños.