El intendente Marcelo Lara Gros y su gabinete encabezaron anoche una multitudinaria procesión religiosa en Orán para pedir el fin del brote del dengue. Participaron 800 personas. El jueves habrá asueto para limpiar la ciudad.
¿Cuál es el último acto de un político salteño ante lo que no puede controlar, incluso cuando se trata de falta de gestión? La respuesta es: saca al Señor y a la Virgen del Milagro y que todo quede en manos de Dios.
Eso fue lo que sucedió en Orán, donde unas 800 personas salieron en procesión por las calles de la ciudad para pedir un milagro que detenga la epidemia de dengue que ya mató a al menos seis personas.
Radio A informó que tras la misa del domingo presidida por el Padre Martín Alarcón, los feligreses salieron en procesión hasta el Hospital San Vicente de Paul. La marcha religiosa fue encabezada por el cuestionado intendente Marcelo Lara Gros, miembros del gabinete municipal y concejales.
Asueto de emergencia
Lara Gros, acusado de no haber trabajado lo suficiente para impedir la epidemia, declaró asueto municipal para este jueves 21 de abril con el fin de descacharrar en todos los barrios. No habrá actividad en las oficinas de la administración pública ni clases.