Fue mucha la queja por la falta de la segunda dosis de la vacuna Sputnik V y se prestó para la chicana política, como todo lo que sucede en este momento en el país.

Ante esta preocupación las autoridades nacionales enviaron una carta al Instituto Gamaleya para que cumplan con los contratos firmados y concreten el envío de más unidades del fármaco.
Como respuesta, los representantes de la firma informaron que enviarán 1000 litros del principio activo para que el segundo componente se haga en Argentina.
Con esta cantidad de materia prima, el Laboratorio Richmond podrá completar la producción de 1.600.000 dosis del segundo componente.
La carta enviada por la asesora presidencial argentina, Cecilia Nicolini, a las autoridades rusas a raíz de las demoras registradas en las entregas del segundo componente fue difundida por varios medios de prensa para demostrar que la Argentina no acepta cambios de condiciones ni favorece a ningún laboratorio en particular.
Luego de la nota, enviada la semana pasada, Argentina recibió más de medio millón de dosis del componente dos de Sputnik V.

Ante la requisitoria de la prensa la funcionaria recalcó que la relación entre ambas naciones es muy buena, constante y de colaboración, desde un primer momento. Y que la recepción de más vacunas y del principio activo para fabricarlas en nuestro país son «frutos de una buena relación», considerando que para Rusia la Argentina ha sido prioritaria en el envío de Sputnik V, poniendo de manifiesto que la falta de dosis es un problema global y no sólo afecta a nuestro país.