La manifestación estudiantil vino a romper con el silencio y encubrimiento hacia docentes acosadores y abusadores en el colegio secundario nro. 5098. El docente acusado fue finalmente apartado de su cargo a realizar tareas pasivas. (Claudia Álvarez Ferreyra)

El martes pasado se produjo, en el municipio sureño J.V. González, la unión de educandos  de los colegios 5098, 5232 y de la Escuela Técnica Nro. 3114 para apoyar a una compañera que desde 2018 vendría siendo víctima de acoso sexual por parte de un docente cuyo caso fue denunciado ante la justicia la semana pasada. Con una sentada, niños, niñas y adolescentes se hicieron escuchar y exigieron a las autoridades educativas que garanticen su seguridad. El profesor acusado, Oscar Escobar, fue apartado finalmente de las aulas y lo pasan a tareas pasivas.

Al enterarse de la medida para denunciar no solo los casos  de acoso sino también el intento de silenciamiento y la revictimización a su compañera por parte de los directivos, desde el ministerio de Educación enviaron una comisión compuesta por la Secretaria de Gestión Sandra Piccolo, la ex supervisora en Anta (ahora  está en Metán) Nora Raful y la actual supervisora en el departamento Claudia Salas. Se conoció que labraron actas, aunque aún no dieron respuestas al estudiantado de qué es lo que harán ante las problemáticas planteadas. Una delegada del Centro de estudiantes manifestó que esperarán hasta la semana que viene o volverán a protestar. También comentó que se intenta apaciguar la situación por parte de las autoridades del colegio, que armaron reuniones para persuadir a estudiantes del turno tarde de que no se sumen a la sentada estudiantil y que les han hecho saber que no están de acuerdo con la medida que tomaron, siendo criticada en clases incluso por algunos docentes.

Legisladores en contra

El diputado por Anta, Pedro Tito Sandez, en la sesión de la Cámara baja pidió que se aparte también a funcionarios/as del Colegio 5098: “Desde esta banca solicito al ministerio de educación, más allá de que las autoridades fueron esta mañana, tomaron nota, pero le solicito a la ministra que se tome una definición urgente, no que se pase a hacer sumarios, a ver cosas burocráticas. Solicito que se separe inmediatamente a los funcionarios para hacer una investigación de los hechos y darle la tranquilidad a los padres, a los alumnos porque sino después si no hubiese sido -por- la actitud de esos chicos del secundario que concurren al colegio histórico de la ciudad de Joaquín V. González no hubiesen ido las autoridades ni tampoco hubiese ocurrido por lo menos una alerta a lo que pueda suceder”.

En todos los casos en que se denuncia  a docentes por acoso o abuso sexual, éstos son sacados de las aulas y pasados a tareas administrativas, mientras duran las investigaciones en la justicia, si resultan sobreseídos incluso vuelven a dar clases.

Algunos antecedentes

En 2017, otra adolescente habría sido víctima del mismo profesor. Las denuncias por ese caso dejan al descubierto la inacción de las autoridades educativas y de la justicia exponiendo a esa estudiante ante el que había sido denunciado como su agresor. 

La presentación legal contra Oscar Escobar, el profesor de educación física que también enseña arte,  fue hecha en la policía como exposición y luego en la Asesoría de Incapaces a cargo de María Susana Zenzano Poma. En la copia  de las denuncias a las que se pudo acceder, se expone el maltrato por parte del docente a una estudiante a la que habría puesto “en situaciones incómodas frente de sus compañeras diciéndole que no hace nada en clases y que luego anda perreando en otra parte”. 

En otra presentación legal de ambos padres de la menor, al ratificar denuncia, se puede leer: “El profesor insulta a su hija quien asiste a 5to año del colegio 5098, la adolescente recibe malos tratos por parte del profesor por lo que en una oportunidad le dijo ´Bombachita Floja´, que los progenitores al tomar conocimiento de la situación el 26 de abril hablaron con los directivos y  que la situación no se revertió, que continuó… hicieron exposición policial, luego el profesor delante de todos los compañeros le reclamó por la exposición que habían hecho los padres aduciendo que se quería vengar, avergonzando a la misma delante de todos. Que acordaron con los directivos que se realizaría una reunión para solucionar la situación y que el profesor previo a la reunión  prevista encerró a la adolescente en un depósito que tienen en el colegio (…) Desconoce qué es lo que pasó allí ya que su hija salió desbordada y atemorizada, que a veces no quiere acudir al colegio aclarando que la reunión no se efectúo de tal manera. Que hablaron con el director del colegio y que la única solución que le dieron es que el profesor no dará clases por unas semanas para que la joven esté más tranquila y se calme la situación. Pero  sienten que la situación no se solucionará de dicha manera es por ello que decidieron asistir a este Ministerio Pupilar”. 

En otra acta, se puede leer que hicieron comparecer en una audiencia a tutores de la adolescente, al profesor Escobar y a directivos del colegio, todo se habría intentado “solucionar” con un pedido de disculpas del docente.

La última denuncia registrada en 2019, que tiene como  víctima a una adolescente de 16 años, ya fue expuesta por este medio. La menor manifestó que sufre situaciones de acoso sexual desde el año pasado, cuando cursaba educación física con este profesor, del que además era estudiante de hockey por parte privada. Para el viernes 26 de abril, la Fiscalía penal a cargo de Gonzalo Gómez Amado dispuso que la menor aporte su testimonio en circuito cerrado, luego de esto recién decidirá si imputa o no al docente Escobar.

Un colegio denunciado 

El año pasado se registraron en el 5098 al menos tres denuncias a docentes por acoso sexual a estudiantes, logramos conocer que dos se presentaron en la justicia. Otro de los casos solo se informó en la institución y los directivos no acataron la ley provincial 7970 de protección a niños, niñas y adolescentes, el  Art. 10 establece que “Los miembros de los establecimientos educativos y de salud, públicos y/o privados y todos los agentes y/o funcionarios públicos que tuvieren conocimiento de una situación de amenaza y/o vulneración de derechos de las niñas, niños o adolescentes deberán comunicar, en el término de veinticuatro (24) horas, dicha circunstancia ante los organismos administrativos provinciales del Sistema de Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes establecidos en la presente Ley, bajo apercibimiento de incurrir en responsabilidad por tal omisión. Dicha comunicación se efectuará de manera fehaciente y sin sujeción a formalidades que obsten a su tramitación inmediata.