En un acto junto a mandatarios provinciales, el candidato de Unión por la Patria llamó a la militancia a «dar vuelta la historia» y «construir un triunfo el 22 de octubre». 

 

Al frente de un escenario colmado de gobernadores, que iban desde Alicia Kirchner y Axel Kicillof hasta el anfitrión Juan Manzur y el formoseño Gildo Insfrán, dirigentes de la CGT y la CTA, los movimientos sociales y el líder de La Cámpora, Máximo Kirchner, Massa llamó a la militancia a «dar vuelta la historia».

Según destacó el portal La Política Online, exultante y entre abrazos, el gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, le preguntó al final: «si ganamos, ¿dónde festejamos la Navidad?».

Estos gobernadores y los intendentes del Conurbano ayudaron a Milei a armar las listas y fiscalizarlas, para sacarle votos a Juntos, pero en efecto no previeron que el libertario sacaría tantos votos. En el peronismo estiman que le sumaron cinco puntos al libertario que ahora quieren revertir.

Antes de cederle el micrófono a Massa, Manzur arengó a todas las tribus que se habían movilizado en la soleada tarde tucumana. «El peronismo ya eligió y el peronismo está unido, ahora vamos para adelante», gritó para que estallaran bombos, trompetas y aplausos.

Luego, Massa se comprometió «a ser el presidente de los trabajadores en la Argentina». «Voy a ser el presidente que le devuelva a nuestros trabajadores el poder de compra que han perdido en el salario, voy a ser el presidente que le devuelva a los trabajadores la dignidad de discutir y de lograr su mejor ingreso, no a partir de la receta que impone el Fondo Monetario Internacional sino de lo que decidamos en la paritaria libre en la Argentina», aseguró ante la sonrisa complacida del líder cegetista Héctor Daer.