Las lluvias dejaron en evidencia que la escuela está destrozada.

No fue una gran tormenta. No hubo grandes precipitaciones, ni ráfagas de viento. Mucho menos granizo: pero aún así alcanzó con esa garúa para dejar en evidencia que la escuela Joaquín Castellanos está destrozada. “Hago responsable al Ministro Cánepa si pasa algo”, dijo un educador.

La escuela ubicada en Reyes Católicos al 1500 tuvo goteras por todas partes. Las paredes quedaron totamente humedeidas. Ordenanzas y docentes tuvieron que colocar baldes para contener las goteras.

“La escuela entró en deterioro hace mucho. Ahora, hace dos años que esto se viene profundizando. Yo trabajo aquí hace 30 años y hemos visto pasar gobiernos anunciando trabajos e incumpliendo después”, sostuvo en una emisora local Marcelino Vargas, docente de la institución y advirtió: “Hasta que no salimos a reclamar o sucede un accidente, no sucede nada”.

“El gobierno debe hacerse cargo de una vez por todas. Cuando los docentes nos autoconvocamos, también es por situaciones como esta. Resulta que hace poco vinieron dos arquitectas a hacer un relevamiento visual y no supimos nada más. ¿Qué va a pasar cuando lleguen las lluvias fuertes?”, cuestionó Vargas finalizando.