Los datos son de un informe del Instituto de Políticas de Género Wanda Taddei, haciendo foco en que a los ataques contra mujeres ahora se suman las agresiones a integrantes de su entorno familiar.

Las masacres de Hurlingham y Florencio Varela, que llenan de horror y espanto a la sociedad, son apenas una muestra de la furia machista en este comienzo de 2017. Es que en los primeros 43 días del año, un total de 57 mujeres fueron asesinadas en el marco de femicidios. Así lo revela un informe del Instituto de Políticas de Género “Wanda Taddei”, haciendo foco que a los ataques contra mujeres ahora se suman las agresiones a integrantes de su entorno familiar, social y afectivo.

El abogado Julio Torrada, titular de la organización, expresó que “las cifras horribles en cantidad de femicidios son una expresión de un crecimiento preocupante de este flagelo social que tenemos en Argentina, y que debemos erradicar con el esfuerzo, el compromiso y políticas públicas que realmente protejan a las víctimas”

En diciembre, el Instituto Wanda Taddei (la mujer asesinada con fuego por su pareja, el músico”, Eduardo Vázquez), realizó un informe donde alertaba que “a pesar de las marchas contra la violencia de género que se hicieron en 2016, en los últimos cien días del año se habían registrado 133 crímenes sufridos por mujeres en un contexto machista.

‘Sólo en la provincia de Buenos Aires se realizan aproximadamente 420 denuncias por día, por mujeres violentadas que lograron romper el muro de silencio, alimentado de golpes, control y amenazas. Pero, cabe decir que muchas veces en las comisarías o en las fiscalías se hace lo posible por eludir la denuncia de la víctima, se las maltrata y así se las vuelve a victimizar, esta vez por las instituciones del Estado, que deberían velar por su protección’, explicó el abogado del Instituto, Julio Torrada.

 

En el informe de los primeros 43 días del año, consignando los 31 de enero y 12 de febrero, la organización civil lleva registrados 57 casos de mujeres asesinadas en femicidios. “Hablamos de crímenes cometidos por varones que tienen un sentido de pertenencia de las mujeres, como si fueran objetos de su propiedad. En el último tiempo, observamos que los femicidas están agrediendo también a sus seres queridos, a personas de su entorno familiar, social o sentimental. Es decir, los femicidas van por todo para destruir completamente a la mujer que cree suya. Esto es lo que tenemos que detener. No se puede seguir soportando tanta violencia y muerte”, dijo Torrada.

“Los casos de femicidios múltiples de Hurlingham y Florencio Varela nos están diciendo que el machismo no se rinde en Argentina, que pide más sangre. Este recrudecimiento de casos, de la actitud machista de tener a la mujer bajo control, someterla a sus deseos y tratar de retenerla en cuando la mujer quiere finalizar la relación, son síntomas de un mal que tenemos que eliminar”, dijo Torrada.

 

Finalmente, el abogado explicó que “en este marco, el Estado sigue brillando por su ausencia, y todo se reduce a buenas intenciones, o discursos con dirección correcta, pero la realidad es que no estamos viendo políticas públicas eficaces”.

Fuente: diario popular