El Director de ENACOM Argentina Gonzalo Quilodran ahora a nivel local parece bettinista y a nivel nacional férreo defensor del albertismo. La cualidad de cambiar de color según la ocasión.
Dentro del Frente de Todos salteños Gonzalo Quilodrán se encuentra algo solo. Es un partido que, en Salta, está un poco vacío. Detentan el poder tipos como Leavy, que ya son parte del pasado, hay una runfla de familiares de esos popes salteños y los egos personales atentan contra cualquier construcción política.
Así que, tal vez, por eso no le queda otra que reunirse con la intendenta Bettina Romero. La excusa: llevar conectividad a los diferentes barrios de la ciudad.
Bettina puede ser una chica PRO, una chica Sáenz, una chica peronista y hasta una chica K. ¿Ideología? Ja. El mismo Quilodrán es un ejemplo de esas propiedades camaleónicas: fue funcionario urtubeycista, estuvo en la Casa de Salta en Buenos Aires y ahora es el pibe Enacom. Quilo puede cambiar de color según la ocasión.
Lo cierto es que quien fue candidato a intendente por el Frente de Todos (y sacó pocos votos) mantuvo una reunión con les bettinistas. Ella, chocha: este coqueteo con el albertismo le sirve y días después por videoconferencia salió sonriente con el funcionario-ultraprogre Matías Lamens.
Mientras, los barrios olvidados solo esperan que cumpla su promesa de “Hacer llegar conectividad a esos lugares donde hoy la brecha digital es muy fuerte”, Bettina y sus amigos del FdT ya se juntan para monitorear la situación e intentar capitalizar políticamente a través del uso de los recursos que otorga estar en el gobierno.