Icono del sitio Cuarto Poder

Discurso inaugural

Ante la ONU, Mauricio Macri reiteró el «llamado al diálogo» con el Reino Unido por Malvinas. El presidente pidió avanzar en la relación bilateral para solucionar la disputa de soberanía.

El presidente Mauricio Macri debutó hoy en la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), en Nueva York. En sus primeras palabras, el primer mandatario reiteró que su objetivo principal es lograr «pobreza cero» en el país. También pidió al Reino Unido dialogar por Malvinas y aseguró que ampliará el cupo de refugiados sirios que alojará la Argentina. El jefe del Estado pidió cooperación internacional para encontrar a los culpables de los atentados contra la AMIA y la Embajada de Israel, compromiso para cumplir las metas del Acuerdo de París contra el cambio climático, y apoyo para Susana Malcorra en la carrera por la Secretaría General de la ONU.

«En la Argentina nos hemos planteado tres grandes objetivos. Avanzar hacia ‘pobreza cero’, esto es lograr un país con igualdad de oportunidades donde nuestros hijos puedan ser protagonistas de su futuro. Un país como el nuestro, que es una potencia productora de alimentos, no puede aceptar que hayas personas pasando hambre», definió el Presidente en el arranque de su mensaje ante la Asamblea.

Macri continuó con énfasis en los ejes de gestión que se planteó desde la campaña electoral: «El segundo es derrotar el narcotráfico, una agenda integral basada en derechos humanos y concentrada tanto en la oferta como en la demanda. Y el tercero es unir a los argentinos a través del diálogo, el respeto a la ley y la democracia».

En el pasaje de su discurso referido a la disputa con el Reino Unido por las islas Malvinas, Macri reiteró el reclamo histórico del país sobre el archipiélago. «El diálogo y la solución pacífica de controversias es la piedra basal de la Argentina democrática, por eso reitero nuestro llamado al diálogo con el Reino Unido para solucionar amigablemente la disputa de soberanía que tenemos por las islas Malvinas, Sándwich y Georgias del Sur. Hemos dado muestras de interés en avanzar en nuestra relación bilateral, que debe ser mutuamente beneficiosa», aseguró.

Como un compromiso ante la comunidad internacional, el mandatario resaltó que la Argentina está dispuesta a recibir a los desplazados por la guerra en Siria. «Otro gran desafío es el de los refugiados. Si bien hace un año nos prometimos no dejar a nadie atrás, las imágenes de hoy nos duelen. La realidad pide que hagamos algo más. Nuestros cascos blancos son ampliamente reconocidos, por eso, en mayo pasado, la Argentina dijo presente en el conflicto. Vamos a ampliar la recepción de refugiados de sirios o países vecinos, privilegiando a las familias con niños. Podremos ir incrementando gradualmente nuestra capacidad de recepción en la medida que el acompañamiento financiero y el apoyo internacional nos lo permitan», señaló.

La participación del Presidente ante la ONU incluyó el pedido a la comunidad internacional de mayor apoyo para el país en la búsqueda de los responsables de los atentados contra la AMIA y la Embajada de Israel. «Vivimos en un mundo cada vez más violento, donde el extremismo radical amenaza a inocentes. En 1992 y 1994, la Arg fue víctima del terrorismo internacional, con dos atentados para los que esperamos ayuda internacional para conocer a los culpables. Mi país condena a grupos que promueven el terror. Para detener este fenómeno, la cooperación internacional es indispensable. Por eso tenemos que promover el desarrollo, que no termina en la frontera», reclamó.

«El cambio climático es el desafío más grande de la Humanidad y, sólo siendo conscientes de esto podremos avanzar sin poner en jaque el futuro. En la Argentina estamos haciendo una propuesta ambiciosa en energías renovables. Firmamos el Acuerdo de París. Llamamos a la sociedad internacional para que haga el mayor esfuerzo y podamos celebrar la entrada en vigencia del acuerdo», dijo Macri en el tramo referido al calentamiento global, otro de los ejes que se habían adelantado como parte del discurso presidencial ante la ONU.

Macri incluyó un pedido de respaldo a la canciller Malcorra, candidata a secretaria general de la ONU. Definió la posibilidad como un avance en la igualdad de género. En ese pasaje del discurso, el jefe del Estado subrayó: «La igualdad de género es un objetivo primordial. La Argentina está asumiendo el empoderamiento de las mujeres como política de Estado. Creamos el Plan Nacional de Acción y Prevención de Mujeres en Riesgo, para terminar con la violencia contra las mujeres. Trabajamos en un enfoque transversal para que las mujeres tengan las mismas oportunidades. Quiero agradecerles el apoyo que ha recibido nuestra canciller a la Secretaría. En el siglo XXI, tener una mujer al frente de esta organización sería un ejemplo alentador».

El mensaje del Presidente tuvo también una mención para el papa Francisco, a quien puso como ejemplo de convivencia pacífica. «La Argentina que acaba de celebrar 200 años de independencia es un país que siempre abrió las puertas a hombres y mujeres que buscan una vida mejor. Convivimos pacíficamente cristianos, judíos y musulmanes, somos una sociedad abierta en un mundo en el que proliferan fragmentaciones. No hay que temerle a la interdependencia. Tenemos que cuidar esta casa común, en la que tenemos que convivir en paz, como dice el papa Francisco», remarcó.

El primer mandatario admitió una situación económica y social compleja en latinoamérica, y rescató algunas medidas contra la pobreza de gobiernos de la región, aunque sin puntualizar en ninguno. «Soy de una región que se piensa como un vecindario común. Durante los últimos años, latinoamérica hizo esfuerzos por reducir la pobreza gracias a políticas sociales robustas y al contexto internacional. Pero hoy el contexto es diferente, la balanza comercial es menos favorable y la inflación castiga a los que menos tienen», dijo Macri, quien cerró su discurso con un agradecimiento a Ban Ki-moon, quien protagoniza su última Asamblea al frente de la ONU.

Fuente: La Nación