La noche del 29 de abril, los detenidos en la Comisaría 42 de Tartagal fueron sometidos a vejaciones y golpizas. Los informes médicos corroboraron hematomas, equimosis, fractura y lesiones diversas. En las próximas horas imputarán a los oficiales
Una noche de terror vivieron los detenidos en la Comisaría 42 de Tartagal la noche del 29 de abril en la que fueron sometidos a vejaciones, golpizas, simulación de ejecuciones y violencia psicológica durante cuatro horas.
Por ello, los diez oficiales de la Policía de Salta que estaban en la dependencia fueron detenidos durante el fin de semana por pedido del fiscal de Derechos Humanos Gabriel González, quien tomó conocimiento de lo que había sucedido a través de las publicaciones de familiares de las víctimas en redes sociales.
Al entrevistar a las personas que estaban detenidas esa noche en la Comisaría 42, las autoridades encontraron un relato espeluznante: entre las 3 y las 7 de la mañana fueron sometidos a torturas, azotes y golpes con diversos elementos como látigo, cachiporras y palos; obligados a desnudarse y permanecer de ese modo, durante largo periodo de tiempo; obligados a meter la mano en el lugar donde defecan, o haber sido sometidos a la simulación de ejecuciones mediante escopetas.
Los informes médicos corroboraron la veracidad de lo denunciado al detectar hematomas, equimosis, fractura y lesiones diversas.
Ante la gravedad de lo sucedido, González solicitó la detención del personal policial involucrado, el secuestro de libro de guardias, de dispositivos móviles, inspección ocular y registro de las instalaciones de la dependencia.
Hoy, luego del control de legalidad ante el Juzgado de Garantías 1 de Tartagal, los policías torturadores serán conducidos a Fiscalía de Derechos Humanos para la correspondiente audiencia de imputación.