Tras adjudicar a Milagro Sala la muerte de 43 gendarmes en Rosario de la Frontera, Clarín revela que las internas entre espías originaron un parte falso que movilizó a Gendarmería cuando la protesta piquetera no representaba peligro.
El artículo en cuestión fue publicado por el diario Clarín que, curiosamente, se encargó de vincular directamente a Milagro Sala con la muerte de los 43 gendarmes con un razonamiento simple: si Milagro Sala no amenazara la paz social del Jujuy los gendarmes no tendrían que haberse trasladado desde Santiago del Estero a Jujuy para encontrar la muerte en la ruta 34 a la altura de Rosario de la Frontera.
Ahora, el mismo diario titula “Un parte falseado de la ex SIDE que concluyó con 43 muertos” para hacer referencia a que la ex SIDE “manipuló información sensible para que el gobernador jujeño Gerardo Morales creyera que un grave conflicto social estaba a punto de estallar en la capital provincial. Para coagularlo, pidió que la asistencia urgente de la Gendarmería, que le envió de madrugada un colectivo con efectivos. El fin de la historia es trágico y conocido: en un accidente vial, se mataron los 43 gendarmes”.
La nota lleva la firma del periodista Claudio Savoia y pue publicada en el día de hoy y entre otras cosas, asegura lo siguiente: “Con el cambio de Gobierno y el arribo de la dupla Gustavo Arribas-Silvia Majdalani en la conducción de la ex SIDE, los delegados de Salta y Córdoba (jefe de la región norte) repitieron el acting: con datos distorsionados o directamente falsos, redactaron un parte de inteligencia alertando sobre supuestas protestas violentas de la agrupación Tupac Amaru de Milagro Sala en Jujuy, que eventualmente podrían ser muy peligrosas. Efectivamente Sala hizo marchas y piquetes por la quita del manejo de planes sociales, pero las protestas no pasaron a mayores”.
Esa información fue comprada por el gobernador electo Gerardo Morales que según el artículo, “tomó en cuenta esos informes y pidió refuerzos a la Gendarmería, que tenía sus propios datos opuestos a los que proveía la AFI. En una gaffe que podría salirle cara, el gobernador admitió por radio que basó su pedido en “informes de inteligencia”, que son ilegales. El accidente de los gendarmes, el lunes 14, desató la crisis, y desnudó otro de los esqueletos que aún sobreviven y operan dentro de la Casa de los espías: el club de delegados de la AFI en el interior”.
Según Clarín, accedió a la lista completa de delegados aunque los nombres no pueden ser publicados para no violar el secreto que impone la ley de Inteligencia. Lo que sí hicieron es dar un listado con los nombre de pila: en Río Gallegos manda Leonardo; en Mar del Plata, Sebastián; en La Plata, Marcelo; en Bahía Blanca, Guillermo; en Misiones, Carlos; Daniel en Neuquén y Claudio en Rosario. Y que los responsables de la jugada de Jujuy son José, el delegado en Salta, y Fabián B., que desde Córdoba dirige toda la región. Esa estructura está bajo la lupa: además de llevarse más de tres de cada diez pesos que los argentinos invierten en una Inteligencia que en verdad los espía a ellos, fueron el ejército con que Pocino disputaba el poder a su adversario interno Antonio “Jaime” Stiuso.
