La Cooperativa Don José, integrada por diez familias, cerrará sus puertas el próximo 30 de diciembre tras años de lucha judicial contra la curia.

Con la voz quebrada, Sonia, integrante de la Cooperativa Don José, relató la difícil situación que enfrentan las diez familias que dependen de esta confitería emblemática de la calle España, en pleno microcentro salteño. Tras la quiebra de la patronal y una larga disputa judicial con la curia, deben desalojar el edificio antes del 31 de diciembre. “Firmamos un convenio para evitar un juicio de desalojo traumático, pero esto significa el fin de nuestra fuente laboral. Muchas somos jefas de hogar”, expresó con desconsuelo durante una entrevista radial.

La cooperativa, formada tras la quiebra de los antiguos propietarios, había asumido la operación del local pagando alquileres que alcanzaron los 2.5 millones de pesos mensuales. Sin embargo, las negociaciones con el Arzobispado para continuar en el histórico inmueble no prosperaron. “Siempre mantuvimos la calidad de nuestros productos y la fidelidad de nuestros clientes, pero la situación del país y los costos nos empujaron a un punto insostenible. Es doloroso”, agregó Sonia.

Actualmente, la cooperativa opera desde un pequeño espacio en Coronel Moldes N° 140, a media cuadra de la plaza Alvarado, donde solo pueden trabajar cuatro o cinco personas a la vez. “Es imposible que diez familias vivan de un lugar tan pequeño. Estamos haciendo todo lo que podemos, incluso participando en ferias de emprendedores, pero no es lo mismo”, lamentó Sonia.

La situación no solo afecta a las familias directamente involucradas, sino también a la comunidad que durante años fue fiel a la confitería. Este espacio era mucho más que un punto de encuentro gastronómico: representaba una parte importante del patrimonio cultural y social del microcentro de Salta.

Pese al dolor, las integrantes de la cooperativa no pierden la esperanza de encontrar un lugar que les permita seguir trabajando juntas. “Sabemos que no es fácil, pero estamos dispuestas a luchar por nuestras familias y nuestros sueños”, concluyó Sonia.