Un exminero bajó al jagüel para inspeccionar el fondo, a 50 metros. Ayer pasadas las 14 se produjo el descenso, que fue autorizado por el juez de garantías Roberto Gaviña. El hecho se dio en el marco de la investigación sobre el caso Solano.
El juez de garantías, Roberto Gaviña habilitó este mediodía a un exminero a bajar al fondo del jagüel, ante las dificultades que tuvo la empresa para poder perforar. El hecho se da en el marco de la investigación en torno al caso Solano. El descenso se produjo cerca de las 14 y mañana realizarán una nueva bajada.
El hombre que accedió a realizar la inspección es Rafael Tufiño, un exminero de 40 años que hace 10 años vive en Luís Beltrán. Esta determinación venía siendo considerada por la querella, que desde el sábado venían manteniendo contactos con Rafael para que llevara adelante el descenso.
Tufiño también es de Oran, y llegó a la región hace 10 años. Trabaja como empleado rural y juez de línea en partidos de la liga Avellaneda de Fútbol.
Según afirmó nunca tuvo miedo, y bajo agarrado a una pequeña silla y colgado de gruesos cables de acero. Llegó hasta el fondo, a poco más de 50 metros. Allí registró que había distintos materiales metálicos y de construcción, como ladrillos y cemento. Esto fue lo que impidió que la campana pueda ingresar a levantar material.
El abogado, Sergio Heredia, dijo el juez no tuvo inconvenientes tras plantearle que alguien baje al jaguel.
Tufiño decidió bajar por sus actividades como minero. “Decidi bajar, porque ya trabaje en mineras. Trabaje en mineras de hasta 1800 metros bajo tierra. Y le dije a Sergio (Heredia) si necesitaba una mano para bajar y anoche me llamó, y me dijeron que se estaba esperando la orden del juez”, aseguró.
“Ví ladrillos, un montón de mugre, fierros, ladrillones”, afirmó. La maniobra de descenso demandó poco más de una hora.