Con una cita de Simone de Beauvoir “el problema de la mujer siempre ha sido un problema de hombres” y datos lapidarios, la fundación que preside Bettina Romero revela que los esfuerzos oficiales para mitigar la violencia de género fracasaron. G.T.
“En septiembre de 2014 el gobierno provincial decretó, en concordancia con la Ley Nacional 26.485 y la Ley Provincial 7.403, la emergencia pública en materia social por violencia de género en todo el territorio provincial por el término de 2 años” recuerda el informe y, tajante, advierte que “a sólo 4 meses que finalice la emergencia decretada, Salta continúa siendo la provincia con la tasa de femicidios más alta del país”.
Y a continuación infiere “la ausencia de un Estado que brinde soluciones concretas, rápidas e integrales a las víctimas de la violencia sexista” y puntualiza que en lo que va del 2016 ya se registraron 6 casos de mujeres asesinadas en la provincia.
La progresión estadística, tomada de organizaciones sociales y oficiales, confirma que la dramática situación en efecto no se ha modificado en lo más mínimo. “Según el Observatorio de Femicidios en Argentina de la Asociación Civil La Casa del Encuentro en el país se registraron en el 2014 un total de 277 muertes y en el año 2015 esta cifra ascendió a 286 casos” señala el documento y subraya que “111 son de Buenos Aires, 23 corresponden a Santa Fe y 19 a la provincia de Salta, ubicándola a esta en tercer lugar en términos de valores absolutos”.
Datos del Observatorio de Violencia Contra las Mujeres Rosana Alderete aportados por el Ministerio Publico Fiscal de Salta, también presentes en el trabajo de Fundara, revelan que desde el 1 de enero y hasta el 15 de mayo “se han recibido en la provincia 2.187 denuncias por violencia de género (y familiar) lo que hace un promedio de 16 denuncias diarias” y confirman un aumento con respecto al año último que concluyó con 4.627 denuncias y un promedio de 13 denuncias por día.
Violentadas y violadas
El detalle de las frías estadísticas nacionales confirma que como antes de la emergencia de género en el 60% de los casos fatales el agresor fue el esposo (o ex esposo), la pareja (o ex pareja), el novio (o ex novio) de la víctima. Y peor aún, en el 71% de los casos tenía algún vínculo cercano con ella (actual o ex pareja, familiar u otro allegado).
“La gran mayoría de los asesinatos ocurrieron ya sea la vivienda de la víctima (27% de los casos) o en la vivienda que compartía con su pareja (25% de los casos) convirtiendo al hogar, en vez de sinónimo de refugio, en un lugar de peligro e inseguridad”, remarca Fundara en su informe.
Y añade un dato aterrador presente en la provincia: la cantidad de violaciones. “La violencia contra las mujeres tiene a su vez otra dimensión que en Salta se manifiesta de manera demasiado gravosa. Según datos del Ministerio de Seguridad de la Nación, Salta es la provincia con el mayor número de casos de violaciones en el país, representando una tasa de 27,5 por cada 100 mil habitantes. Esto la ubica por encima de la media nacional que es del 8,7”, informa sin eufemismos.
Pese a la declaración de la Emergencia en Violencia Contra la Mujer, Salta está por encima de la media nacional también en cuanto a los femicidios. “Según el Censo 2010, se puede ver que Salta tiene prácticamente un tercio de la población de Santa Fe y 15 veces menos habitantes que Buenos Aires. Lo que lleva a posicionar a Salta en primer lugar con una tasa de femicidios, cada 100 mil habitantes, de 1,56% superior al 0,72% que registra Santa Fe y al 0,71% de Buenos Aires” especifica el texto de Fundara.
Sin remedio
Contrariando al catalán Joan Manuel Serrat que desde hace años canta que “nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio”, el reciente documento de Fundara presenta una verdad muy triste: pese a estar habilitado, por la emergencia pública en materia social por violencia de género, a realizar acciones y generar políticas orientadas a la prevención, sanción y erradicación de la violencia de género en todas sus manifestaciones el gobierno no pudo ni siquiera disminuir la indefensión de las mujeres.
“A sólo 4 meses que finalice la emergencia decretada, Salta continúa siendo la provincia con la tasa de femicidios más alta del país” remarca y advierte que por ahora los hechos de violencia que ocurren contantemente en el país en general y en la provincia “se vislumbran casi imposibles de frenar”.
Un tiempo atrás
“El Gobierno de la Provincia, en acuerdo general de Ministros y en carácter de necesidad y urgencia, decretó la emergencia pública en materia social por violencia de género en todo el territorio provincial” informó un parte de prensa oficial el 8 de septiembre de 2014 y explicó que “el decreto provincial 2654 habilita al Poder Ejecutivo a realizar acciones y generar políticas públicas orientadas a la prevención, sanción y erradicación de la violencia de género en todas sus manifestaciones”.
El anuncio se hizo en conferencia de prensa en la Casa de Gobierno del Grand Bourg y fue encabezado por el entonces ministro de Gobierno, Eduardo Sylvester, y por los ministros de Derechos Humanos, Justicia y Salud, Marianela Cansino, Pamela Calletti y Oscar Villa Nougués.
“Las diversas situaciones que se dieron en los últimos tiempos en Salta, en las cuales fueron víctimas mujeres, nos obliga como responsables de la gestión pública, de la implementación de políticas públicas, a tratar de dar respuesta a una situación que preocupa a todos los salteños” expresó Sylvester y anunció que se crearán juzgados de Violencia Familiar y de Género, un juzgado Fiscal Penal de Violencia de Género, hogares de protección temporal como instancias de tránsito y albergue de las mujeres víctimas de violencia de género, y se instalarán botones antipánico en toda la provincia, y además se establecerá una red de contención social y sanitaria entre el Estado y organizaciones no gubernamentales especializadas en la materia.
Casi 2 años después, pese a la concreción de algunos de esos anuncios, la situación de violencia sexista continúa presente en la provincia.