Mauricio Macri dijo en Jujuy que Milagro Sala «merece estar presa» mientas el gobernador Morales criticó al organismo internacional que pidió la prisión domiciliaria. Macri aseguró que respetar la independencia del Poder Judicial de Jujuy.
«Si todas las denuncias que pesan sobre esta señora son verdad ella merece estar presa. No podemos permitir que los juicios duren diez o veinte años como nos tenían acostumbrados con los temas de corrupción», aseguró el presidente en dialogo con Canal 2 de Jujuy, tras encabezar un acto proselitista de Cambiemos en la capital jujeña.
Lo que ponen en cuestión los organismos internacionales como la Cidh y la ONU no es la veracidad de las denuncias a las que se refiere Macri sino el proceso penal que tuvo Sala, que está arrestada en prisión preventiva desde enero de 2016. La dirigente social se encuentra desde entonces alojada en la Unidad 3 de Mujeres del Servicio Penitenciario de Jujuy, conocida como «Penal del Alto Comedero», ubicado a tres kilómetros de donde Macri protagonizó ayer un acto de campaña.
«Respeto la independencia de las provincias y más la de sus sistemas judiciales. Yo predico y trabajo todos los días para que el federalismo sea una realidad y lo peor que puedo hacer si yo demando por una justicia independiente federal es no aceptar que no haya una en cada provincia», sostuvo hoy el jefe de Estado que nada dijo sobre las múltiples denuncias que pesan sobre la justicia jujeña que incluye el nombramiento de dos diputados adictos al gobernador Morales como miembros del máximo tribunal de justicia de esa provincia.
En torno a la resolución de la CIDH, recordó que fue el mismo gobierno nacional quien les dijo «vengan, vean y saquen sus propias conclusiones», cuando consultaron por la situación penal de la dirigente de la organización Tupac Amaru. Morales fue más duro con la Cidh: «Se han terminado convirtiendo en una facción de burócratas que vive en Washington y no conoce la realidad de Jujuy», dijo el gobernador.
La resolución de la CIDH, difundida el último viernes, urgió al Estado argentino la adopción de «medidas alternativas a la detención preventiva, como el arresto domiciliario, o bien, que la señora Milagro Sala pueda enfrentar los procesos en libertad».