Reclamaba vacaciones no tomadas por 268 días y el fallo de la Cámara Federal de Salta le marcó límites a su accionar negligente de juntar “muchas vacaciones”.
En la administración pública, este tipo de acciones son una “trampilla burocrática” que se suele utilizar para obtener alguna “ganancia” del Estado, ya que el monto del pago se renueva a la fecha actual.
La disputa judicial la planteó como una de las primeras acciones de su gestión el actual Rector, ingeniero Daniel Hoyos, al rebatir también lo dispuesto por el Consejo Superior en sus resoluciones de 2021 (N°437/21) y en 2022 (N° 300/22).
Los votos de 12 Consejeros Superiores avalaron en aquel momento el pago de las vacaciones al ex rector Claros. Entre los que se destacan los actuales decanos y ahora candidatos Miguel Nina (Económicas) y Julio Nasser (Naturales); también había votado a favor el actual decano Héctor Casado (Ingeniería), en tanto que la decana Mercedes Vázquez (Humanidades) votó de manera negativa. Hubo 7 votos negativos y 2 abstenciones en aquel momento.
Esta sentencia marca un precedente importante para los “avivados estatales” de la Unsa a la hora de gestionar sus vacaciones y en el “exceso de facultades del Consejo Superior de la UNSa” de determinar que si se debían pagar esa cantidad de vacaciones. Lo que nos hace pensar acerca del ejemplo de la gestión responsable de los recursos que tienen que dar las autoridades institucionales.
