El juez Pablo Arancibia había ordenado el archivo de la causa de la muerte de Luján y Yanina, ahora el juez Abel Fleming, consideró que los planteos de la familia Peñalva son al menos dignos de ser tenidos en cuenta. Una pequeña luz en el caso.

“La causa se había cerrado injustamente” declaró la familia Peñalva, tras la decisión en febrero pasado del juez de Instrucción Pablo Arancibia, quien había ordenado el archivo de la causa por considerar que las jóvenes se suicidaron.

Arancibia había descartado agresiones físicas o ataques sexuales y ordenó el archivo de las actuaciones “por no encuadrar el hecho denunciado en figura penal alguna”. Arancibia destacó en su escrito las “tendencias” suicidas de las jóvenes.

Por su parte, el abogado de la familia Peñalva, Vásquez y el perito en Criminalística Lucas Delgado aseguraron que existían indicios de la presencia de otras personas en la escena del crimen.

El recurso de Vásquez –el cual fue aceptado por el juez Fleming- señalaba puntos presentes en la investigación considerados “oscuros” y “sospechosos”.