Trabajadores municipales, a cargo del control comercial, denuncian que no cuentan con vehículos para realizar sus inspecciones. Se mueven en taxi.

 
Los inspectores de la Dirección de Control Municipal realizan su trabajo en taxi o remís y hasta en autos particulares porque la dependencia no cuenta con móviles oficiales. Así lo denunció José Vilte, delegado gremial, y confirmó la realización de una medida de fuerza y “quite de colaboración desde hace unos días”.
 
Los empleados de Control Comercial reclaman por la falta de vehículos pero, además, exigen herramientas e indumentaria de trabajo y el pago de adicionales a inspectores y choferes.
 
Por eso, este miércoles realizaron un paro de actividades y advirtieron que el quite de colaboración, de 4 horas por día que venían desarrollando, podría endurecerse hasta llegar al cese de las tareas.
 
Según denunciaron “faltan $50 mil para poder retirar del taller 3 vehículos que estaban en reparación” y, mucho peor aún, “falta tinta para los sellos y actualización de las computadoras”. El funcionario responsable del área, Nicolás Avellaneda, por ahora no se refirió al tema pero en despachos municipales confirmaron que “se están haciendo todas las gestiones necesarias para dar respuestas”.