El problema de precariedad , condiciones arbitrarias de trabajo y urgencia económica denunciados por las medidas de fuerza de los remiseros no se estaría reflejando en la lista que por estas horas maneja la Autoridad Metropolitana de Transporte en desmedro de los legítimos trabajadores con situaciones de vulnerabilidad social y laboral.
El extenso conflicto entre remiseros y la A.M.T. llegó a su fin, a partir de un acuerdo firmado entre las partes para facilitar la incorporación de los remiseros dados de baja.
En la lista aparecen propietarios de varios vehículos, , esposas de titulares y una cantidad de personas que no estuvieron ni en la dilatada protesta, ni que son choferes registrados.
A estos se suman choferes que manifiestan que ya se habían empadronado por 200 pesos en un lavadero de Barrio Morosini, sin conocimiento de la Autoridad Metropolitana de Transporte donde figuran sólo 26 agencias registradas legalmente. Esta situación que explota en la fila de los futuros beneficiarios de licencias provisorias amenaza con dejar fuera del acuerdo a los verdaderos necesitados.
El tema del transporte ilegal brinda cada día, sobradas muestras de malas prácticas e impunidad. Por estas horas cantidad de trabajadores y choferes acuden a la calle Mitre , sede de la AMT con una nota manifestando su situación familiar en calidad de Declaración Jurada, con la premisa de que tendrán prioridad quienes sean titulares de familia y el trabajador/a del volante sea el sostén de la misma.
Entre las filas de los trabajadores -saben perfectamente quienes sostuvieron la protesta a lo largo de casi un mes- están quienes aparecen de imprevisto con manifestaciones fraudulentas o apócrifas sin la situación emergente que plantea el acuerdo provisorio que habilitará licencias colectivas en una cooperativa para que trabajen un máximo de 45 vehículos .
Los trabajadores en protesta -que fueron menos de 45- ahora ven en los listados que les permitirán volver a trabajar, el doble de gente solicitante, agravado por situaciones que no son de emergencia , como por ejemplo, matrimonios (o una cónyuge u otro es lo que correspondería) , titulares de varios vehículos o gente no registrada en calidad de chofer.
Entre los más paradójicos figura uno de los voceros, Sergio Salinas , quién estuvo empadronando en su lavadero personal a choferes y gente de su barriada con la promesa de acceder a una licencia por un valor de 200 pesos. Esto es lo que más irrita a quienes son choferes legítimos o bien expulsados de alguna agencia o que prestan efectivamente un servicio alternativo similar, por la situación económica apremiante y que ahora se encuentran con que el vecino almacenero, pugna por anotarse en la cooperativa.
El panoramana se presenta más que complejo ya que la lucha es entre quienes lograron un acuerdo para poder trabajar tras la protesta -que sostienen que fueron empadronados por UCRA que tampoco tiene personería gremial, ni jurídica- mientras otros fueron anotados en un lavadero.
La actual esposa de Salinas, Carla Eugenia Machado ( lic. 1013), y otros 2 solicitantes , Avalos Gustavo Daniel ( lic. 1003) y Choque , Luis Fernando ( ( lic. 1822) también están en poder de Salinas, con lo que extrañamente es apoderado de varios de los supuestos trabajadores.
En tanto Aranda Ruiz y Lucas Matías ( Lic. 775) tiene en su poder licencias de taxis y remises a nombre de su esposa y su hermano respectivamente, y se encuentran livianamente, solicitando nuevas.
Quien fue conocido en los medios de comunicación por estar encadenado fue Carlos Escalante ( lic. 1564), no trabaja como remisero aunque posee 2 vehículos a su nombre, de modo que le correspondería el beneficio de Cooperativa Salta por lo extremo de la medida de fuerza llevada adelante, pero no así por la titularidad de varias licencias en una misma familia. Gutierrez Miryam ( lic 203) es propietaria de 3 licencias que no están dadas de baja, en tanto que Tuco Bazán no se encuentra registrado como chofer, a diferencia de sus compañeros.
El problema de blanqueo de cuáles son las verderas licencias «caídas» y los apoderados de varias licencias, desnuda la manipulación y desmanejo de las licencias que durante mucho tiempo cumplieron el papel de obsequios , ofrendas o vueltos, por parte de referentes políticos municipales y que la AMT no pudo controlar desde que fue creada y durante los conflictos ya conocidos por todos.
Esta semana , el titular de la Autoridad Metropolitana del Transporte, Federico Hanne y su asesor Matías Risso, negaron a la Agencia de Remiseros la posibilidad de que no suban las tarifas, con la excusa de que necesitan recaudar. Las agencia legales se niegan a aumentar las tarifas que impone AMT pero con idéntico argumento de crisis, entregan permisos provisorios. De esta manera, la crisis es lógica para aumentar las tarifas e ilógica para entregar permisos ilegales.
Mientras tanto, se aguarda que los funcionarios de AMT quienes están en pleno conocimiento de quienes son los legítimos beneficiarios de licencias para trabajar, tomen los recaudos necesarios para evitar que más agencieros ilegales -y mafias organizadas- ingresen al sistema de transporte en detrimento de los verdaderos laburantes que no la están pasando nada bien.